PALMA DE MALLORCA, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
EADS, empresa matriz de Airbus, ha confirmado el principio de acuerdo alcanzado con los siete países que participan en el programa del avión militar A400M, entre los que se encuentra España, para la construcción de la aeronave, y ha reconocido que las negociaciones se encuentran en "la recta final" y sólo quedan algunos flecos de carácter técnico para alcanzar el acuerdo "definitivo".
Así se lo ha hecho saber EADS al Gobierno español, a través de una misiva enviada al Ministerio dirigido por Carme Chacón, quien este jueves confirmó en Palma de Mallorca, en el marco de la reunión informal de Ministros de Defensa de la Unión Europea, haber cerrado este principio de acuerdo con la corporación aeronáutica.
De esta forma, fuentes ministeriales informaron a Europa Press que en la carta remitida por EADS, en la que la compañía expresa su disposición a seguir negociando para cerrar en breve un acuerdo "definitivo" con los siete países implicados en el desarrollo del avión, el presidente de la compañía señala que quedan aspectos de carácter técnico para terminar de negociar.
Así, las mismas fuentes indicaron que se trata de cuestiones relativas a cómo se aportan y distribuyen los 1.500 millones de euros que los siete países han ofertado a EADS para financiar el proyecto, y que se sumarán a los 2.000 millones ya pactados con anterioridad.
De este modo, se están buscando fórmulas para articular estos 1.500 millones de euros de financiación adicionales porque si se proporcionan en forma de crédito, Airbus tendrá que provisionar sobre los mismos.
Concretamente, los 1.500 millones se proporcionarían a través de un mecanismo similar a un crédito para la exportación que se devolvería posteriormente con los 'royalties' de las exportaciones, según reveló este miércoles la ministra Chacón.
Así, las negociaciones entre EADS y los países implicados se retomarán en el mes de marzo, según señalaron desde el Ministerio, que resaltaron la importancia de que se pueda dar continuidad al proyecto, que seguirá adelante con una participación financiera de los gobiernos de 3.500 millones de euros.