MADRID 27 Feb. (EUROPA PRESS) -
Telefónica España ha modificado su estrategia de venta de terminales móviles, que hasta el momento se basaba en la subvención de dispositivos, y optará por otros modelos como la financiación sin intereses y la recompra de dispositivos usados.
De esta forma, la compañía se adelanta a sus competidoras, que ya han mostrado en alguna ocasión que el modelo de subvención de terminales móviles resulta "demasiado costoso" para las operadoras, y ha lanzado una batería de iniciativas encaminadas a cambiar el modelo de comercialización de dispositivos.
En concreto, con la primera de las iniciativas, que entran en vigor el 1 de marzo, los clientes de Movistar accederán a una oferta variada de terminales, siempre con mejores precios que los que se ofrezcan a los usuarios que provengan de otras compañías móviles.
Esta oferta se complementará también con mejores condiciones en los planes de fidelización o puntos, que los clientes obtienen a través de sus facturas y con los que pueden acceder a los mejores equipos en condiciones ventajosas.
ACUERDO CON LA CAIXA
Así, además de ofrecer un precio mejor al cliente de Movistar que al que provenga de otras compañías, la operadora les ayudará a acceder a los mejores terminales con financiación -desde 10 euros al mes y hasta 18 meses- sin intereses
Para ello, Telefónica ha llegado a un acuerdo con La financiera Finconsum, propiedad de La Caixa, que será la empresa con la que los clientes tendrán que concretar las cantidades a financiar. La operadora asumirá los costes de los intereses para que el cliente no tenga que hacerlo.
Así, por ejemplo, los clientes podrán acceder a un Samsung Galaxy desde 10 euros al mes, y a pagar en un máximo de 18 meses, y sin necesidad de presentar la nómina para acceder a la financiación.
TERMINALES USADOS
También a partir del 1 de marzo, los clientes de Movistar podrán entregar los terminales que ya no utilizan, en cualquiera de los distribuidores y puntos de venta que tiene la compañía, y obtener hasta 245 euros para poder adquirir uno nuevo.
Además, si el dispositivo que entrega el cliente es Blackberry o Sony Ericsson se añadirán otros 30 euros a la cantidad de dinero abonada por Telefónica.