BRUSELAS, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea confirmó hoy que ha realizado inspecciones por sorpresa en las instalaciones de varios fabricantes de sistemas flexibles de transmisión de corriente alterna -que se utilizan para aumentar la capacidad de transferencia de electricidad en las redes de transmisión- por tener indicios de que estas compañías pueden haber pactado los precios de sus productos, vulnerando así las normas comunitarias que prohíben las prácticas comerciales restrictivas.
"La Comisión tiene motivos para creer que las empresas afectadas pueden haber vulnerado las reglas de la UE que prohíben los cárteles y las prácticas comerciales restrictivas", dijo el Ejecutivo comunitario en un comunicado.
Siguiendo su práctica habitual, el Ejecutivo comunitario no desveló el número ni la identidad o la nacionalidad de las compañías investigadas. Sólo el grupo de ingeniería suizo ABB confirmó que sus instalaciones en Suecia habían sido inspeccionadas, informa Reuters.
Las inspecciones por sorpresa constituyen un paso preliminar en las investigaciones sobre cárteles. El hecho de que Bruselas las lleve a cabo no significa que las empresas sean culpables ni prejuzga el resultado de la investigación, destacó la Comisión.
No existe ningún plazo estricto para completar este tipo de investigaciones. Su duración depende de una serie de factores, entre ellos la complejidad de cada caso, el grado de cooperación de las empresas afectadas y el ejercicio del derecho de defensa.