MADRID 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
El consumo de vino con denominación de origen (DOP) en los hogares españoles alcanzó los 103,8 millones de litros en los diez primeros meses de 2014, un 1,7% más, con un valor de 362,8 millones de euros, lo que supone un incremento del 2,7% respecto al mismo periodo del año anterior.
El precio medio se incrementó un 1%, hasta los 3,50 euros por litro, según los datos aportados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OEMV). Este producto es el que más peso tiene en términos de valor, al suponer casi el 50% del gasto total en vino de los hogares españoles.
Este aumento del consumo del vino con denominación de origen, sin embargo, no compensa la caída del resto de categorías analizadas, registrándose una caída global del consumo de vino en alimentación en España del 5,8% en volumen, hasta los 306,8 millones de litros y del 3,2% en valor, hasta los 730,3 millones de euros, con aumento del precio medio del 2,7%, hasta los 2,38 euros por litro.
En términos absolutos, el vino sin DOP es el que más se ha dejado de consumir en alimentación, al perder en estos diez primeros meses del año 19,5 millones de litros y 25,8 millones de euros.
Por su parte, los espumosos pierden un 4,9% en volumen, hasta los 13,4 millones de litros y un 11,4% en valor, hasta los 57,6 millones de euros, tras un descenso del precio medio del 6,8% hasta los 4,31 euros por litro.
Asimismo, según los datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente aportados por el OEMV, la categoría 'otros vinos', pierde un 1,4% en volumen y un 0,4% en valor, mientras las bebidas con vino, que incluyen sangrías y tintos de verano, caen un 2,4% en volumen y un 11,1% en valor, tras descender el precio medio un 8,9%, hasta los 73 céntimos por litro.
Ante estos datos, el OEMV ha destacado que son los vinos con denominación de origen los que mejor comportamiento registraron en 2014 entre los consumidores españoles, pese a su mayor precio medio (3,50 euros por litro frente a 1,26 de los vinos sin DOP) y a suponer una cantidad total inferior a la de los vinos sin indicación.
"Este buen comportamiento, no compensa sin embargo la pérdida de consumo de otras categorías de vino en España, cuya todavía floja recuperación en nuestro país sí se ve más que equilibrada con la buena marcha en exportaciones hacia los mercados internacionales, donde España ya vende más del doble del vino que se consume internamente", ha resaltado.