Economía/Empresas.- Boeing y Airbus apuestan por aviones más eficientes y por los biocombustibles para reducir emisiones

Actualizado: martes, 16 marzo 2010 15:37

MADRID, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -

Boeing se ha marcado como objetivo lanzar al mercado nuevos aviones que supongan una reducción del 15% de las emisiones de CO2, como consecuencia de una mejora de su eficiencia, y un ahorro del 25% del uso de combustible para 2020, gracias a la sustitución de la flota por aeronaves de nueva tecnología.

Durante su comparecencia en el Congreso ante la Comisión Mixta para el estudio del cambio climático, Argüelles subrayó que Boeing dedica más del 75% de su inversión en I+D en medidas que tienen que ver con el impacto medioambiental, con el objetivo de que el 100% de sus plantas consigan la certificación ISO 14001.

Argüelles explicó que aunque el mayor impacto medioambiental de sector se produce cuando un avión está operativo, no hay que despreciar ninguna línea del proceso de fabricación. El objetivo es que la industria aérea, que contribuye con un 2% al impacto de las emisiones de CO2 según Naciones Unidas, no alcance el 3% en 2026, como se prevé.

Así, señaló que el compromiso de Boeing es sacar al mercado aviones un 15% más eficientes, incentivar el uso de carburantes alternativos a los fósiles, y a corto plazo, contribuir a un sistema de gestión del tráfico aéreo más eficaz.

Precisamente, destacó que el nuevo 787 de Boeing, del que ha vendido 851 unidades, y cuya primera entrega prevé realizar a finales de este año a la aerolínea japonesa ANA, consume entre 2,3 a 3,6 litros, frente a los 7 litros de un 4X4 o los 3,1 litros de un utilitario.

Argüelles estimó que para 2013 los aviones podrían volar con un 30% del combustible de carga de origen biocombustible.

Asimismo, consideró necesario acelerar las mejoras del control del tráfico aéreo con la tecnología ya disponible, lo que tendrá a corto plazo un impacto medioambiental más llamativo. Como ejemplo, expuso que un avión con descenso continuado (CBA) puede ahorrar por cada vuelo 2.000 litros de combustible.

En esta línea, apostó también por las operaciones punto a punto por ser más eficientes. "Se acortará la trayectoria de los viajes, los aviones gastarán menos y tendrá que cargar menos combustible". El objetivo es mejorar un 25% el impacto del conjunto del sistema en 2012 sin mermar el crecimiento del negocio, que cifró en un 4,5% anual.

Por ello, instó a los Gobiernos a participar de una manera más proactiva junto a la Organización Internacional de la Aviación Civil (OACI), sin cargar toda la responsabilidad sobre las compañías aéreas, ya "excesivamente castigadas", y los fabricantes.

REDUCIR UN 50% LAS EMISIONES CO2 EN 2020.

Por su parte, el vicepresidente de Estrategia de Airbus Military, Rafael Acedo, aseguró que el fabricante europeo está "plenamente" decidido a impulsar el uso de biocombustibles como una oportunidad para minimizar el impacto medioambiental de la industria aérea, todavía por explorar.

No obstante, señaló que en las pruebas realizadas con mezclas del 50% de carburante de oriegn vegetal los resultados son satisfactorios.

"Reducir y mejorar la eficiencia de las aviones es absolutamente mandatorio y, al no poder buscar otras fuentes alternativas, la aeronáutica reclama la prioridad en el uso de biocombustibles", indicó.

Asimismo, se refirió a los avances en la construcción de aviones en fibra de carbono, con una reducion del 20% del peso de la aeronave, lo que reduce en la misma proporción el uso de carburante, al proyecto del 'cielo único' y al programa SESAR para la optimización del espacio aéreo europeo con rutas más precisas, que permitirá multiplicar por tres su capacidad y acortas los tiempos de viaje.

Objetivos todos ellos, dijo, que contribuirán a aproximarnos al objetivo de reducir al 50% las emisiones de CO2 derivadas de la aviación en 2020 y las líneas de eficiencia del transporte aéreo marcadas por la Organización Internacional de la Aviación Civil (OACI).

Por su parte, incidió los fabricantes ya están trabajando en las nuevas generaciones de motores, con una reducción del 10% del consumo de combustible, y de nuevas aeronaves, más ligeras (un 20% menos de peso) y más eficientes, para un consumo de carburante de un 20%, en la misma proporción. No obstante, concluyó que las empresas por sí solas no pueden sostener este esfuerzo por lo que reclamó más apoyos públicos.