WASHINGTON, 30 Mar. (Reuters/EP) -
El Pentágono necesita conocer si EADS tiene de verdad intenciones "serias" sobre su participación en el concurso de tanqueros para la fuerza armada estadounidense antes de prorrogar hasta el 10 de mayo el plazo de presentación de las ofertas.
En ese caso, esta "modesta extensión" ayudaría a asegurar que los nuevos aviones adquiridos son competitivos, según declaraciones del jefe de la fuerza aérea estadounidense, el general Norton Schwartz.
"Tienen que decir que son serios y entonces el departamento decidirá por cuanto tiempo lo permite", señaló el alto cargo militar durante un encuentro con la prensa, asegurando que el asunto aún no se había cerrado y que no existía un calendario definitivo para una posible decisión.
El consejero delegado de Airbus, Thomas Enders, declaró a un diario alemán el pasado lunes que la compañía decidiría en las dos o tres próximas semanas si finalmente presenta una oferta en solitario para el concurso.
Schwartz precisó que el Pentágono había mantenido continuados contactos con EADS sobre la petición de 90 días adicionales para responder a la solicitud final de propuestas después de que su socio, Northrop Grumman decidiera abandonar el concurso.
En el caso de acudir al concurso, EADS lo haría con el modelo A330 tanquero, que competiría con el modelo más pequeño 767 de constructor estadounidense Boeing.
El consorcio europeo decidió el mes pasado no acudir al concurso de los aviones cisterna en Estados Unidos, ya que, en esta ocasión, existen "motivos jurídicos" por los que la nueva licitación beneficia a Boeing.
En febrero de 2008, el consorcio europeo EADS, asociado con Northrop Grumman, fue seleccionado y logró el contrato para fabricar 179 aviones cisterna para la Fuerza Aérea de Estados Unidos por un importe global cercano a los 40.000 millones de dólares (más de 29.530 millones de euros) en un concurso público.
ANTIGUA POLÉMICA.
Sin embargo, en marzo de ese año su rival Boeing solicitó oficialmente explicaciones sobre su decisión a la Fuerza Aérea norteamericana y el Pentágono reabrió en septiembre la puja por los 'tanqueros' de EEUU, después de las protestas de Boeing, principal fabricante de los aviones militares y civiles estadounidenses, que consideraba el programa como "una prioridad". La reapertura del expediente, que incluyó nuevas normas, fue avalada por la Oficina de Contabilidad del Gobierno norteamericano.
La retirada definitiva de EADS dejaría vía libre a Boeing, tras años de lucha entre ambas empresas, por hacerse con un contrato que tendría un valor potencial de hasta 100.000 millones de dólares (73.816 millones de euros) por proveer de 179 tanqueros a la Fuerza Aérea estadounidense.
No obstante, en las últimas semanas existen rumores de mercado que apuntan a las intenciones de EADS de lanzar una oferta, aunque el grupo ha reiterado en varias ocasiones que sólo lo hará si cuenta con posibilidades de ganar y con una prolongación significativa de los plazos.