Economía/Turismo.-Los europeos pueden viajar desde hoy a las Bahamas, Seychelles e Isla Mauricio sin necesidad de visado

BRUSELAS 28 May. (EUROPA PRESS) -

Los ciudadanos europeos no necesitan a partir de hoy solicitar un visado para viajar a seis países del Caribe --las Bahamas, las Seychelles, la Isla Mauricio, Barbados, Antigua y Barbuda y las islas de San Cristóbal y Nevis-- gracias a un acuerdo suscrito esta mañana entre la Unión Europea y estos países en Bruselas y cuyos ciudadanos tampoco tendrán que solicitar un visado para viajar a Europa. Unos 800.000 europeos viajan a estos países cada año, según datos del Ejecutivo comunitario.

El acuerdo, aplicable desde su firma, garantiza la posibilidad de viajar sin visados para los ciudadanos europeos y de estos seis países en posesión de un pasaporte (diplomático, de servicio u ordinario) para las estancias que no superen los tres meses de duración.

La exención de visado no será aplicable a aquellas personas que se desplacen con el objetivo de realizar una actividad remunerada. En este caso, cada Estado miembro como cada uno de los seis países implicados podrán decidir si exigen un visado al visitante de acuerdo a la normativa comunitaria o nacional que corresponda

Además, el convenio afecta a todos los Estados miembros con la excepción de Reino Unido e Irlanda, mientras que en el caso de Francia y Países Bajos, el acuerdo sólo será aplicable en su territorio continental y no en sus regiones de ultramar.

El comisario de Justicia, Libertad y Seguridad, Jacques Barrot, subrayó su deseo de que los acuerdos de liberalización de visados para visitas de corta estancia coronados hoy "contribuyan a mejorar los contactos personales entre los ciudadanos de ambas partes" y recordó que se trata de los primeros acuerdos firmados de este tipo por el Ejecutivo comunitario con terceros países.

Bruselas abrió negociaciones por separado con cada país para coronar sendos acuerdos de liberalización de visados en junio de 2008, negociaciones que fueron completadas en octubre de 2008.

Por parte europea, el convenio fue suscrito en Bruselas por Barrot y la vice-ministra de Asuntos Exteriores checa, Helena Bambasová, cuyo país preside hasta finales de junio la Unión Europea.