ROMA, 27 Ene. (Reuters/EP) -
Los trabajadores de varias empresas de transporte público de Italia han acudido este viernes a la huelga en protesta por las medidas liberalizadoras del Gobierno de Mario Monti, que podría permitir la entrada de empresas privadas en los servicios públicos como trenes y autobuses para ganar más competencia.
El servicio de autobuses, trenes y tranvías se ha visto interrumpido en varias ciudades, mientras que en Roma se ha celebrado una manifestación a la que han acudido miles de personas ante el temor de los sindicatos de que las medidas de liberalización supongan la disminución de los derechos de los trabajadores.
"Estamos hartos de estos programas de gobiernos que siempre golpean a los más débiles, los pensionistas y los trabajadores, y no a los que están en las élites políticas o aquellos con el verdadero poder económico en Italia", señaló Mauro Rustici, miembro de un sindicato italiano y que se ha manifestado este viernes en Roma.
Las medidas de Monti también han provocado fuertes protestas de los taxistas y camioneros además de críticas de los sectores de la abogacía y las farmacias. El paquete de medidas todavía tiene que ser aprobado en el Parlamento.
Estas nuevas leyes siguen a una serie de recortes en los presupuestos del Estado y el aumento de varios impuestos que fueron aprobados antes de Navidad y que pretenden conseguir que se estabilice el déficit en 2013 y que la deuda pública italiana se reduzca.
Entre las medidas de desregulación, destacan el aumento del número de farmacias, cambiar el sistema que actualmente restringe la concesión de nuevas licencias para taxis y abolir las tasas mínimas que cobran los abogados.
Además, la industria ferroviaria se abrirá a capital privado y se podrán contratar nuevos trabajadores que no tendrán el mismo tipo de contratos que los actuales funcionarios. El Ejecutivo italiano pretende aprobar más adelante la flexibilización del mercado laboral e incentivar el trabajo juvenil.
Monti ha asegurado en varias ocasiones que no retirará las reformas y las nuevas leyes a pesar de las protestas en las calles ya que cree que las medidas tienen una amplia aceptación entre la población.
El subsecretario del Gobierno, Antonio Catricala, aseguró que "la idea de que la desregulación es un sacrificio está equivocada". "La desregulación supone una oportunidad", añadió.
Las protestas han sido reducidas y la popularidad del Ejecutivo sigue siendo elevada. Esta semana, los camioneros realizaron varios bloqueos en las carreteras principales de Italia que provocó que Fiat y Coca Cola, así como varios supermercados, vieran reducido el suministro.