MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) - El Ministerio de Fomento promoverá entre los cuatro y seis próximos años un parque de 20.000 viviendas públicas para destinarlas a alquiler con el fin de aumentar la oferta de este tipo de pisos y contribuir así a atajar al alza que está registrando su precio. Se trata de la medida 'estrella' del plan que el titular del Departamento, José Luis Ábalos, anunció en su primera comparecencia en el Congreso para "reorientar" y dar un "giro social" a la política de vivienda. Esta nueva política se centrará precisamente en el alquiler y tiene el doble objetivo de garantizar el derecho constitucional de acceso a la vivienda y evitar nuevas 'burbujas' en este mercado. Se trata de un "reto de la máxima importancia" que considera debe iniciar acometiendo "con urgencia" medidas para "paliar" la actual escalada de los precios del alquiler de pisos, que alcanza ya máximos en algunas grandes capitales. En este sentido, su principal medida es la promoción de 20.000 viviendas en renta, si bien reconoció que se trata de una iniciativa "a medio o largo plazo", en el horizonte "de entre cuatro o seis años". Según detalló, este parque de pisos públicos se levantará en las ciudades con más tensiones en este mercado y en colaboración con las comunidades y ayuntamientos correspondientes. Estas administraciones aportarán los suelos correspondientes y el Estado central, la financiación. En tanto se ejecutan estas viviendas, Ábalos apuesta por habilitar pisos de la cartera de Sareb a través de un acuerdo con este 'banco malo'. No obstante, el primer paso de este 'macroplan' de vivienda de Ábalos se dió este mismo jueves con la constitución de un grupo de interministerial que trabajará sobre las medidas que contiene. Además, en paralelo, ha 'ascendido' a Secretaría General el área de su Ministerio encargado de este sector, hasta ahora gestionado a través de una Dirección General. En cuanto a las medidas que incluye el plan de Ábalos se completan con cambios en la legislación sobre alquiler, así como de su régimen fiscal, un ajuste del Plan de Vivienda y una mayor cooperación con administraciones autonómicas y locales, que son las que tienen el grueso de competencias en la materia. Así, el ministro anunció un cambio en la Ley de Arrendamientos Urbanos para "reequilibrar" los derechos del arrendatario y el arrendador. De esta forma, volverá a alargarse la duración de los contratos de alquiler y se fijarán "límites razonables" a las garantías adicionales al tradicional mes de fianza que los propietarios de los pisos están comenzado a exigir a los inquilinos, como son avales bancarios o contar con contrato fijo o determinado nivel de renta. Además, se garantizará que en caso de compraventa de una vivienda en renta el nuevo propietario respete el contrato de alquiler que esté vigente. El ministro de Fomento pretende además abordar cambios fiscales "que estimulen la oferta de pisos en alquiler y contribuyan a moderar su precio". Asimismo, avanzó su intención de "reorientar" el Plan Vivienda 2018-2021 que dejó aprobado el anterior equipo del Ministerio para mejorar su actual dotación de 1.443 millones de euros, mejorar las condiciones para que los jóvenes logren ayudas al alquiler y articular nuevas líneas de ayudas. El ministro también abordará con comunidades y ayuntamientos en "fenómeno" del alquiler turístico, "acotando" la definición de "arrendamiento de temporada" que recoge la Ley y también redefinirá lo que se considera vivienda vacía para impulsar su puesta en el mercado. "Ha habido poca ambición en política pública de vivienda hasta ahora y eso explica en parte el incremento del coste del alquiler y la desprotección de los ciudadanos", argumentó Ábalos. "Por ello es preciso acometer nuevas medidas encaminadas a garantizar el acceso por parte de las personas y familias con menores recursos, y de forma particular a los jóvenes", aseguró. "Además, hay que evitar que se produzcan nuevas burbuja en la vivienda que desestabilice otra vez la economía", concluyó.