MADRID, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
Los partidos de la oposición han criticado este martes en el Pleno del Congreso la escasa eficacia de la normativa sobre segunda oportunidad aprobada por el Gobierno del PP en 2015, y ha reclamado profundizar en varias de sus medidas, facilitando, entre otras medidas, las quitas de deuda y la dación en pago.
Las exigencias de una reforma de la ley, recogidas en sendas iniciativas de PSOE y Ciudadanos debatidas conjuntamente en la Cámara Baja, han sido secundadas también por Unidos Podemos-En Comú Podem, el PDeCAT, PNV, Compromís y Foro Asturias.
En su intervención, el diputado Rodrigo Gómez García ha lamentado que los jóvenes no busquen emprender dadas las "consecuencias negativas" que, en caso de fracaso, puede acarrear "para el resto de su vida". "Nuestros autónomos y emprendedores no quieren ayudas, ni subvenciones, sino que los poderes públicos no se lo pongan más difícil", ha aseverado.
"Si tu negocio sale mal, prácticamente vas a la muerte civil", ha apostillado, lamentando que, entre otras cosas, "cualquier ingreso es susceptible de embargo inmediato", lo que condena al afectado "a vivir el resto de su vida en la economía sumergida".
Por parte del PSOE, Victoria Begoña Tundidor ha recordado el "discreto arranque" de la ley de segunda oportunidad, pues frente a los 1.400 concursos presentados en España, en Francia o Alemania se celebran unos 100.000 cada año.
"En España, tan solo las empresas tienen posibilidad real de liquidar deudas. El objetivo del Gobierno tendría que haber sido superar esta anomalía y resarcir a personas sobrepasadas por las deudas", ha dicho, reclamando "poner al mismo nivel a persona física que jurídica".
"SEGUNDA OPORTUNIDAD, LA DE LOS BANCOS"
Esta escasa incidencia también ha sido criticada por la diputada de En Comú Podem Lucía Martín, pues cree que "dos años después todo el mundo está de acuerdo en decir que no ha servido para nada". "Ni sirve para que las personas se quiten de la deuda, ni es asequible ni habilita procedimiento sencillo o rápido", ha resaltado.
Así, ha manifestado que "es vergüenza que, después del pisoteo al derecho a la vivienda, aún haya leyes tan favorables a los bancos y aún no se haya aprobado la dación en pago". "Segunda oportunidad, la que dieron a los bancos para seguir cobrando su deuda hipotecaria", ha espetado, en dirección a la bancada 'popular'.
Por parte del PNV, su portavoz económica, Idoia Sagastizabal, se ha mostrado favorable a regular la dación en pago, aunque ha rechazado varias propuestas de la iniciativa, como la oficina antidesahucios centralizada, o la eliminación de las cláusulas abusivas --debería de regularse en la ley hipotecaria, ha argumentado--.
En todo caso, se ha mostrado favorable a regular de nuevo la segunda oportunidad, y atender a la situación de fiadores y avalistas, así como incluir el crédito público en esta reforma.
Por parte del Grupo Mixto, Isidro Martínez Oblanca (Foro Asturias) ha avanzado su apoyo por la falta de eficacia de la actual ley, Ferrán Bel (PDeCAT) ha reiterado la necesidad de impulsar una reforma de la ley, y Joan Baldoví (Compromís) ha lamentado la "sensación de hastío" que siente, pues cree que "mientras siga el señor Rajoy seguirá sin modificar la Ley Concursal". "No tiene ninguna voluntad, ni en esa ley ni en ninguna que tenga función social", ha dicho.
"NUNCA SE HABÍAN REGULADO ESTAS CUESTIONES"
Por parte del PP, el diputado Pablo Matos Mascareño ha abogado por reformar la ley de segunda oportunidad, aunque ha instado a hacerlo "en el marco de la trasposición de la directiva", y ha recordado que ningún otro grupo, únicamente el 'popular', se decidió a regular medida en este sentido.
"Nunca se habían regulado en nuestro país estas cuestiones", ha aseverado, enumerando que "ha sido el PP, y no la izquierda, el que regula por primera vez la obligación de reEstructurar la deuda hipotecaria, la quita de parte de capital pendiente, dación en pago".
Por ello, ha criticado la iniciativa socialista, pero también a Ciudadanos por llevar al Pleno del Congreso una iniciativa ya aprobada en comisión, y les ha acusado de llevar a cabo, más que una política "de cambio", "una política adolescente o de la edad del pavo".