LONDRES, 11 Jul. (EUROPA PRESS) -
Seis meses después de una de las mayores catástrofes naturales de la historia, Haití se encuentra tan desolado como el primer día tras el terremoto del pasado 12 de enero que se cobró la vida de 230.000 personas. Sólo se ha recibido una mínima fracción de la cantidad de ayuda económica comprometida por la comunidad internacional, y el Gobierno haitiano todavía no ha aprobado ningún plan concreto para reconstruir las zonas más devastadas por el terremoto, según denuncian agencias de ayuda.
El senador estadounidense John Kerry anunciaba la semana pasada que el proceso de reconstrucción se encontra "bloqueado", entre la falta de material y la desorganización de los responsables de dar un techo a los más de 1,5 millones de afectados, residentes de lo que ya era de por sí el país más pobre de las Américas.
La ONG Save the Children, que ha descrito las operaciones de rescate y atención tras el terremoto como "la emergencia más compleja de la historia de la organización", declaró la semana en un comunicado que, a día de hoy, la mayoría de los supervivientes "carecen prácticamente de acceso a un refugio seguro, agua potable, electricidad y cuidados médicos".
La amenaza no ha terminado. Con el comienzo de la temporada de huracanes, cualquier nueva tormenta que pudiera cernirse sobre el país podría anular todos los esfuerzos realizados hasta ahora para ayudar a la población.
De igual modo, la Federación Internacional de las Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Creciente aseguran que la "situación actual es insostenible". "La Cruz Roja y otras agencias están, actualmente, aportando servicios de parte de las autoridades haitianas", indicó el comunicado. Estas agencias "trabajan por encima de su capacidad colectiva y mandato. La aproximación actual sólo está comprando tiempo a la espera de que se tomen decisiones a largo plazo. Esta situación no puede seguir eternamente", recoge el diario británico 'The Guardian'.
El pasado viernes, ActionAid criticó duramente os planes de reconstrucción del país, que consideró "fallidos" y "necesitados de un replanteamiento urgente". Ninguna de las propuestas tienen en cuenta las necesidades de las víctimas del terremoto. "La reconstrucción, que está siendo supervisada por la comisión dirigida por (el ex presidente estadounidense) Bill Clinton y el primer ministro haitiano Jean-Max Bellerive, refleja los deseos de los países donantes en lugar de las necesidades de los propios haitianos".