PARÍS, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente del Banco Central Europeo (BCE), advirtió este martes de que algunos países podrían perder su credibilidad fiscal como consecuencia de los elevados déficit generados por las consecuencias de la crisis económica, lo que lastraría la confianza y podría perjudicar la recuperación de la economía, según explicó el banquero en una entrevista con el diario francés 'Le Monde'.
"Las posiciones fiscales son mucho más diversas de lo que uno podría pensar. Algunos países están en una posición relativamente favorable, porque su gestión pasada fue acertada y prudente, mientras que otros están muy cerca de perder su credibilidad", aseguró.
Trichet lanzó un claro mensaje a los países miembros y señaló que todos los Estados deben tener una estrategia fiscal creíble a medio plazo para los hogares, negocios e inversores. "Si no tienen confianza en la sostenibilidad de las finanzas públicas a medio y largo plazo, se consume menos e invierte menos", advirtió.
"El éxito de la recuperación en Europa depende de la confianza de los inversores en la solvencia de los emisores soberanos", recalcó el máximo responsable del BCE, quien aclaró que si no existe esta confianza, los inversores exigirán mayores tipos de interés de mercado, lo que penalizaría a los sectores público y privado del país en cuestión.
Sobre la debilidad del dólar frente al euro, Trichet recordó las palabras del presidente de la Reserva Federal estadounidense (Fed), en las que se compromete a vigilar de cerca la evolución de la moneda e insiste en que EEUU necesita un dólar fuerte.
Además, destacó que el euro "no ha sido creado" para competir con el dólar o para reemplazarlo en el sistema internacional de reservas. "Fue creado para completar el mercado único europeo y para proporcionar estabilidad y prosperidad a Europa", recordó.
"AÚN NO PODEMOS CLAMAR VICTORIA"
Sobre la recuperación económica, Trichet se mostró optimista en cuanto a que en el tercer trimestre la eurozona ya ha registrado crecimiento del PIB positivo en tasa intertrimestrales, pero señaló que hay que ser "cautelosos" porque aún persisten las incógnitas.
"Hay mucha incertidumbre, tanto a un nivel global como en el caso de la eurozona, particularmente en lo concerniente al crecimiento del próximo año". Aún no podemos clamar victoria", sentenció.