MADRID, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
Renfe ha puesto a la venta un máximo de cincuenta locomotoras eléctricas aptas tanto para trenes de viajeros como de mercancías, pero actualmente retiradas de servicio comercial, en el marco del programa de renovación de material rodante de la operadora.
La compañía ferroviaria venderá estas máquinas tractoras a través de un proceso público, en el que ha fijado el próximo 10 de febrero como plazo límite para recibir propuestas de los interesados a hacerse con este material.
La venta incluye el compromiso de que Renfe Integria, la división de talleres e industrial de la compañía ferroviaria, se encargue del posterior mantenimiento de las locomotoras durante un periodo mínimo de cinco años. No obstante, la máquinas se venderán tras la realización de una gran reforma integral, de la que también se encargarán las instalaciones de Renfe.
Las locomotoras en venta corresponden a las series S/269, S/279 y S/289, todas ellas ya excedentarias, retiradas del servicio comercial que prestaron tanto para transporte de viajeros y mercancías, según el anuncio publicado hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
Las ventas de material ferroviario fuera de uso ha formado siempre parte de la estrategia de rotación y renovación del parque de trenes que Renfe lleva a cabo, y muchas de ellas se han cerrado con otros países, fundamentalmente de Latinoamérica.
En 2008 la operadora cerró con Argentina una de las mayores ventas de material de su historia, al acordar la transacción de distintas unidades (locomotoras, automotores, coches y furgones) que supuso un importe de 120 millones de euros. En aquel caso, Renfe también se reservó el derecho a participar en el mantenimiento y rehabilitación del material vendido.
Además de a Argentina, Renfe ha vendido también material a otros operadores y países (Cuba, brasil, Chile, Irán y Túnez, entre otros).
Las ventas se registran en paralelo a las compras de nuevo material que Renfe viene realizando, fundamentalmente en los últimos años, entre las que destacan las inversiones en trenes AVE para explotar las nuevas líneas de Alta Velocidad que se han ido y se irán poniendo en servicio.