GINEBRA, 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) está aumentando su ritmo de trabajo en los campos de refugiados somalíes en Dadaab (frontera de Kenia) según crecen las necesidades humanitarias de los niños y las familias somalíes que allí se encuentran.
UNICEF precisa que el ritmo medio de llegada de refugiados somalíes a Dadaab es de 1.300 personas cada día, un 80 por ciento de estos desplazados son mujeres y niños, hasta conformar un total de 400.000 alojados en los tres campos de la zona, que en términos intrínsecos es ahora la tercera ciudad más grande de Kenia.
El Fondo infantil de la ONU advierte de que la mitad de los niños que llegan a los campos de desplazados desde el sur de Somalia están desnutridos. "Las noticias de niños que mueren por el camino o justo a su llegada a los campamentos son, desgraciadamente, comunes", lamenta la organización.
En respuesta, UNICEF ha aumentado la entrega de suministros de alimento terapéutico a hospitales y centros de estabilización en los campos de Dadaab y las comunidades de los alrededores, para el tratamiento de los niños menores de cinco años que tienen desnutrición.
UNICEF también trabaja con las autoridades sanitarias locales para establecer un centro nutricional en la comunidad fronteriza de Liboi para garantizar que las familias que llegan a Kenia tienen acceso a servicios de nutrición y de primeros auxilios lo más rápidamente posible.
De igual modo, ha enviado medicinas al centro de salud de Liboi, incluyendo kits sanitarios suficientes para prestar apoyo a 10.000 personas, para el uso de esta comunidad y para el tratamiento de los refugiados que cruzan hasta Kenia.
"Muchas familias somalíes que cruzan hasta Kenia por Liboi no se dan cuenta de que aún deben caminar otros cien kilómetros para llegar hasta los campos de refugiados en Dadaab", dice Olivia Yambi, representante de UNICEF Kenia. "La salud de algunos niños desnutridos que atraviesan Liboi es tan precaria que simplemente no pueden esperar hasta Dadaab para recibir tratamiento".
"Disponer de suministros de nutrición y salud cerca de la frontera salvará vidas de niños que de otra forma se podrían perder en su camino a Dadaab", ha dicho.
VACUNACIONES E HIGIENE
UNICEF también está trabajando en campañas integradas de vacunación contra el sarampión y la polio, desparasitación y suministro de suplementos de vitamina A, tanto en Dadaab como en las comunidades de Liboi, Garissa y parte de Wajir. Más de 200.000 niños menores de cinco años serán vacunados en las próximas semanas. Hasta el momento ya han sido vacunados más de 100.000 niños.
"La desnutrición puede debilitar el sistema inmunológico de un niño, aumentando su propensión a enfermedades infecciosas como el sarampión o la polio", indica Ibrahim Conteh, Coordinador de Emergencias de UNICEF en Dadaab. "Estamos actuando ahora porque estas enfermedades pueden extenderse con mucha rapidez en condiciones de hacinamiento como las que se dan ahora en los campos".
El acceso a agua potable y a saneamiento es esencial para asegurar la salud y el bienestar de los niños. En Dadaab, UNICEF está posibilitando el acceso a agua limpia para 22.000 refugiados en las inmediaciones de los campos, proporcionando 1.600 jarras de agua y dos depósitos. También está trabajando con sus aliados en la instalación de 16 puntos de agua para los refugiados que caminan desde la frontera por las tres principales rutas que conducen a Dadaab.
En educación, UNICEF tiene previsto construir 146 aulas provisionales en los campamentos para acoger a los refugiados recién llegados y poder aliviar la congestión en los centros que ya existían. Estos centros estarán situados en las afueras de los campos, donde viven muchos de los refugiados recién llegados.
Suministros que ya estaban almacenados han servido para hacer frente al flujo de niños en los campos: se instalaron 20 espacios de aprendizaje o aulas, se proporcionaron cien kits de enseñanza para 5.000 niños, 60.000 libros de texto somalíes, y 64 kits de ocio infantil para 6.400 niños y jóvenes en los campamentos de Dadaab.
UNICEF y Save the Children han instalado Espacios Amigos de la Infancia para 2.000 niños en los campamentos durante la semana pasada. UNICEF participa en una evaluación liderada por ACNUR para determinar la existencia de violencia de género para, en colaboración con otros aliados, extender el apoyo a los campos y las comunidades.
En toda la región, UNICEF calcula que serán necesarios 315 millones de dólares para ampliar las operaciones a lo largo de seis meses y poder llegar a los niños en las zonas afectadas por la sequía con asistencia preventiva y de emergencia. Ahora está centrado en el desarrollo de intervenciones integradas en los aspectos que atañen a la supervivencia y el desarrollo infantil.