MADRID, 13 May. (EUROPA PRESS) -
Los grupos parlamentarios del Congreso de los Diputados están promoviendo una declaración institucional en la que la Cámara Baja pida al Gobierno socialista que apoye "resueltamente" la codificación oficial del derecho humano a la paz en el seno del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
Para ello, los grupos proponen, en una borrador de la declaración conjunta, que se constituya en Naciones Unidas un grupo de trabajo "que inicie la codificación y el desarrollo progresivo del derecho humanos a la paz".
En el texto se felicita a la Asociación Española para el Derecho Internacional de los Derechos Humanos (AEDIDH), que es la organización civil que está promoviendo esta declaración, por su "exitosa campaña a favor del derecho humano a la paz, cuyos hitos más sobresalientes son la Declaración de Luarca de 2006 y la Declaración de Bilbao de 2010".
Además, los grupos invitan a los parlamentos de las comunidades autónomas, a los gobiernos autonómicos y locales "que aún no lo hayan hecho" a pronunciarse a favor del derecho humano a la paz. El borrador pide que traslade esta declaración al Parlamento Europeo, al secretario general de Naciones Unidas y a la Asamblea de la OSCE, entre otros organismos.
PRESENTACIÓN EN EL CONGRESO
En un acto organizado esta mañana en el Congreso de los Diputados, el presidente de la Fundación Cultura de Paz y ex director de la UNESCO, Federico Mayor Zaragoza, ha celebrado lo "bien" que han respaldado los grupos esta iniciativa, por lo que espera que sea aprobada por la Cámara "de manera unánime".
En el acto han intervenido portavoces del PSOE, CiU, IU. El presidente de la AEDIDH, Carlos Villán, ha asegurado que la ausencia del representante del PP "no es debido a ninguna disensión" sino a que ha tenido que "otro compromiso parlamentario".
El vocal del PSOE, Álvaro Cuesta, no ha dudado de "la buena acogida" que tendrá la propuesta en el Gobierno y ha defendido que España debe actuar como "torre vigía" del cumplimiento de los Derechos Humanos.
Además, ha recalcado que "los ciudadanos ya no van a ser espectadores" sino que van a "intervenir" en las decisiones que tomen los gobiernos y organizaciones, sobre todo a través de las nuevas tecnologías. El portavoz socialista ha abogado por eliminar cualquier tipo de violencia, ya sea física, estructural (como el analfabetismo o la pobreza) o cultural (como la violencia de género)".
Por su parte, el portavoz de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, ha advertido de que "la política es cada vez menos protagonista de la gente" debido a "la exageración de las diferencias" y al hecho de "convertir al adversario en enemigo". Por su parte, Jordi Xuclà, ha incidido en la "notable pasividad de la comunidad internacional" antes los conflictos bélicos del siglo pasado.