LOGROÑO 31 May. (EUROPA PRESS) -
El ex marido y acusado de la muerte de la policía hallada en el Ebro ha insistido, a través de un comunicado, en que "no fue el responsable" de los hechos que se le imputan. Dice que sigue imputado aún "habiendo ausencia total de pruebas" y que su acusación se debió "al ser la ex pareja y haber tenido la mala suerte de que estos hechos se produjeron en un momento álgido de noticias sobre violencia de género".
B.B.M., que será juzgados en los próximos días y para quien el Fiscal pide 20 años de cárcel, acompaña su comunicado del escrito de su defensa. En el mismo, se indica que "no existen pruebas objetivas" que le incriminen, por lo que pide su absolución.
Recuerda, el escrito, que fueron matrimonio desde 2002 a 2008, fecha en la que se separaron. Del matrimonio nació una hija, quedando la custodia en manos del padre, que se trasladó a vivir a La Rioja, mientras la ex mujer permanecía en Granada. Posteriormente, ésta se trasladó a Logroño donde podía ver a su hija "con absoluta libertad, sin sujeción, por tanto, a horario o restricción alguna", según recoge el letrado del acusado.
La defensa niega, que el 30 de octubre del año 2009 a las 11,54 horas y en el transcurso de una conversación de casi 26 minutos de duración ( 25,57 minutos ) María Vanessa comunicara a Borja su intención "firme e irrevocable de solicitar la guardia y custodia de la hija común, y que no estando el padre conforme con esta decisión se dirigiera éste al domicilio de María Vanessa en Lardero con la deliberada intención de matarla, llegando a atacar a su víctima por sorpresa hasta conseguirlo para luego, con el propósito de dificultar la investigación, arrojar su cadáver al Río Ebro donde fue hallado el 15.11.2009, a su paso por Baños de Ebro, en avanzado estado de putrefacción".
El contenido de la relatada conversación telefónica carece absolutamente de toda prueba, ya que "no existe grabación que pueda demostrar el contenido ni de ésta ni de ninguna otra conversación con la fallecida".
Por ello, "no se dispone en la instrucción de ninguna prueba objetiva ni de naturaleza científica, de todas cuantas han sido practicadas, que permita acreditar, directa o indirectamente, ni siquiera remotamente, la participación del acusado ni en la desaparición ni en la posterior muerte" de la policía.
Dice, finalmente, que en el juicio oral puede haber un "evidente desequilibrio", puesto que existen cuatro escritos de acusación con versiones "uniformes", presentados por el Ministerio Fiscal, Abogacía del Estado, Asociación 'Themis' y acusación particular.