MADRID 17 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones para la Prevención del Maltrato Infantil (FAPMI) denunció hoy que "los temores infundados", los "tópicos" y "el desconocimiento que tienen los ciudadanos respecto de sus obligaciones legales" retrasan demasiado las notificaciones a los servicios sociales cuando un menor de edad ha padecido alguna tipología de maltrato, lo que agrava el problema y prolonga el sufrimiento del niño o adolescente.
En declaraciones a Europa Press, la técnico de FAPMI Rosa Arruabarrena señaló que si bien se han producido avances significativos en asuntos como la violencia de género o la violencia entre iguales, en el caso de los malos tratos a niños y adolescentes la sociedad "aún no está concienciada".
En este sentido, la trabajadora social lamentó que aún son muchas las personas que no acuden a notificar un caso de este tipo porque "creen que tienen que tener la situación totalmente confirmada, cuando en realidad la investigación corresponde a los servicios sociales y no pasa nada por informarles".
Otro de los tópicos que la FAPMI incide en desmentir es que la administración vaya a apartar al niño de su entorno sólo porque se haya recibido notificación sobre un posible caso de maltrato. "Siempre se va a trabajar en función del bienestar del menor y las situaciones de tutela automática y salida de su núcleo familiar son la última decisión de una lista", explicó.
A esta "percepción distorsionada en la sociedad de lo que son los servicios sociales", se suma otra serie de factores que dificultan la llamada de atención sobre estos casos. Arruabarrena enumera, entre otros, que "a los niños en general no se les presta atención", la privacidad de la familia o la falta de conocimiento entre los ciudadanos del imperativo legal de advertir a las autoridades en cuanto se detecte "una situación de riesgo".