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Médicos del Mundo denuncia que hay miles de personas con problemas graves de salud y sin tarjeta sanitaria
MADRID, 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Empleo ha corregido a la Subdelegación del Gobierno en Vizcaya abriendo una vía para la renovación del permiso de residencia de dos inmigrantes enfermos de corazón y riñón a quienes se les había denegado. Esta medida, infrecuente, puede sentar un precedente al que se acojan extranjeros en tratamiento médico que hayan tenido que abandonarlo por caer en situación irregular.
Se trata del caso de J., nigeriano que sufrió un transplante de riñón en junio de 2013, y de M., un senegalés pendiente de un transplante de corazón. Ambos tenían un permiso de residencia por motivos humanitarios y a ambos les fue denegada su renovación el pasado mes de mayo, cuando la Subdelegación del Gobierno en Vizcaya decidió en dos resoluciones idénticas que podían continuar el tratamiento médico en sus países de origen.
Su abogado, el también presidente de CEAR Euskadi, Javier Galpasoro, denunció entonces esta situación, tanto a los medios de comunicación como en la vía administrativa. La respuesta del Gobierno ha llegado el 20 de junio a los particulares y por escrito después al grupo parlamentario Amaiur en el Congreso: se utilizará una vía alternativa para renovar los permisos de estas personas y que puedan vivir legalmente en España.
"A la vista de las circunstancias excepcionales que concurren en las personas mencionadas, se comunica que se va a iniciar a su favor la tramitación de sendos procedimientos de autorizaciones de residencia temporal de las previstas en la disposición adicional primera del Reglamento de la Ley de Extranjería en los que la competencia para resolver está atribuida a la titular de la Secretaría General de Inmigración", expone el Gobierno.
La norma a la que hace referencia la respuesta contempla efectivamente que "cuando concurran circunstancias excepcionales no previstas en el Reglamento", la Secretaría General de Inmigración podrá otorgar autorizaciones individuales de residencia temporal. También el Consejo de Ministros, a petición de la misma, está facultado para adoptar este tipo de decisiones.
UN PRECEDENTE PARA TODO UN COLECTIVO
Galpasoro destaca lo inusitado de esta medida, pues no tiene constancia de que hasta el momento, se hubiera producido una situación similar. Aunque, según afirma, "se abre una nueva vía", la respuesta de la Administración sería en todo caso una renovación por otro año del permiso temporal que ya tenían estas dos personas, cuando, en opinión del letrado, dado su estado de salud requerirían una medida "más estable".
"Si se le ha concedido a una persona una autorización de residencia por circunstancias excepcionales de tipo humanitario, en la que ya has aceptado que esa persona por su estado de salud no puede trabajar, no puedes limitar ese permiso a un año. Tenemos que buscar una solución de futuro, porque si no, el año que viene estaremos de nuevo mendigando que les renueven", señala en declaraciones a Europa Press.
Con todo, celebra la resolución del Gobierno, que "puede ser un precedente" para los inmigrantes en situación similar, dado que desde la reforma sanitaria de 2012, las personas sin permiso de residencia no tienen derecho en España a la asistencia sanitaria, salvo de urgencia o si se trata de niños o embarazadas. "Se ha abierto un camino que hasta ahora, estaba vedado", plantea el letrado.
Desde Médicos del Mundo, lo toman con cautela. La portavoz Eva Aguilera explica que en toda España hay muchísimas personas en esta situación e incide en que no todos tienen el apoyo de las ONG o acceso a un abogado. Además, aunque "muchos serían susceptibles de solicitar un permiso especial por razones humanitarias, es un trámite muy difícil, costoso y largo" con resultado incierto, "una vía poco esperanzadora".
NO TODOS TIENEN ACCESO A UNA ONG
En Médicos del Mundo sólo tienen constancia de un caso de éxito de este tipo. Se trata de una marroquí paciente de cáncer que fue acompañada por la ONG en Castilla-La Mancha. Tras mucho "pelear" con el gobierno regional y la Delegación del Gobierno central y recurrir al Defensor del Pueblo, consiguió un permiso de residencia por circunstancias excepcionales que le dio acceso a la tarjeta sanitaria.
"Esta mujer tuvo la suerte de contactar con nostros. Si se hubiera encontrado sola y sin este acompañamiento no habría podido llegar hasta el final y aún así, es el único caso que hemos visto de este tipo, nunca antes. Hay que tener en cuenta además que los casos que atendemos son una mínima parte de los que hay, muchas personas no están acudiendo a ninguna organización y no tienen una red que les acompañe", explica.
En el lado opuesto, un hombre argentino de 56 años, con más de diez viviendo en España, que perdió su permiso de residencia en 2008 al quedarse sin trabajo. En 2012 su situación irregular le arrebató la tarjeta sanitaria. Padece una cardiopatía grave, pero tampoco tiene derecho a tratamiento. Médicos del Mundo le procura atención "por la puerta de atrás", gracias a la voluntad de sus colaboradores. No ha conseguido regularizar su situación.