VALENCIA 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Solidaridad y Ciudadanía de la Generalitat Valenciana, Rafael Blasco, ha señalado que en 2035, en España harán falta casi 4,5 millones de inmigrantes para compensar el envejecimiento de la población española, para mantener el crecimiento demográfico y la tasa de natalidad", así como para "mantener un mercado laboral de forma activa con personas en plena capacidad para desarrollar sus responsabilidades".
Blasco se ha pronunciado de esta manera tras la presentación del Informe Anual sobre Migraciones e Integración CeiMigra 2009 que en esta edición trata sobre las migraciones y la crisis económica internacional, en colaboración con Bancaja, la Generalitat y la Compañía de Jesús.
En dicho informe, al que se ha referido el conseller, apunta que dentro de 30 años, la población española podría alcanzar casi los 48 millones, de las cuales, 13,7 millones tendrán 65 o más años (28,7%). También señala que, en este momento, cualquier política restrictiva de entrada y permanencia y potenciadora de expulsiones "dificultaría la sostenibilidad demográfica y económica, vía reducción del consumo, producción y empleo".
En la Comunitat, la inmigración "continua teniendo una participación muy activa en la vida económica y social" y son un factor para "dinamizar la cultura", ha apuntado Blasco. Asimismo, ha destacado que los principales colectivos de inmigrantes están "muy bien distribuidos" por el territorio valenciano desde el punto de vista geográfico.
En este sentido, ha incidido en la necesidad de políticas alternativas para tratar la inmigración que deben ser "centradas" en cada región. Así, ha señalado que en la Comunitat la población inmigrante representa el 18% y este crecimiento, además, "no ha tenido un crecimiento gradual". Por ello, "estamos ante un factor que, si las políticas son las adecuadas, va a fortalecer" a la Comunitat, ha asegurado.
INMIGRACIÓN POR BARRIOS
El conseller ha indicado que el informe "rompe el tópico" de que la concentración de inmigrantes en determinados barrios "ayuda a degradar la situación de la trama urbana". "Eso no se sostiene con los datos que tenemos" que indican que las tres capitales de la Comunitat "prácticamente carecen de barrios con concentración de población inmigrante", ha asegurado.
Así, en las ciudades de Alicante, Castellón y Valencia representan el 23,7% de la población extranjera residente en la Comunitat --el 33,9% son extracomunitarios--.
En Alicante ciudad, los barrios con más concentración de población extranjera sobre la media provincial (24,2%) son los de Virgen del Remedio, Colonia Requena y Juan XXIII 2º Sector; en Castellón (18,5%), las zonas con mayores niveles son una parte del centro, Urban II, Rafalafena Grapa y El Barranquet-Pobles del Sud.
En Valencia, los barrios con mayor censo de población extranjera son Orriols (31,8%), y en Poblats Maritimis, hay dos secciones con más del 30%, El Grau (39%) y Nazaret (34,2%).
Además, la Comunitat cuenta con 44 municipios cuya población procedente de la UE supone entre un 18% y un 33% de la población total del municipio; 20 con más de un 33% y hasta un 50%, y 15 municipios con más del 50%. En cuanto a extracomunitarios, y tres tienen población extracomunitaria superior al 18% del total.
RETORNO VOLUNTARIO
Por otro lado, Blasco ha destacado que en España "no se ha producido un retorno voluntario masivo" de población extranjera. Así, señala que el "alto costo" del retorno, las "escasas posibilidades laborales" en sus países de origen, los "lazos comerciales y afectivos" y el tiempo de residencia con algunos de los motivos que retraen al inmigrante a regresar a su país de origen.