PAZARBHANGA (INDIA), 16 (Reuters/EP)
Las lluvias en India han causado 109 muertos desde que comenzaron en junio pasado y han dejado al menos a 400.000 personas sin hogar en el estado nororiental de Assam, en una tragedia que, según algunos expertos, se ha agravado por la corrupción y la mala gestión de los recursos del río Brahmaputra.
Un responsable de la Comisión de Derechos Humanos de Assam, un organismo gubernamental, ha dicho a Reuters que sospecha que millones de dólares destinados a la lucha contra las inundaciones han sido desviados en los últimos cinco años por funcionarios del departamento de agua de Assam. La comisión ha exigido una investigación de alto nivel.
El primer ministro indio, Manmohan Singh, quien representa a Assam en la cámara alta del Parlamento, ha indicado que se trata de las peores inundaciones de los últimos tiempos y ha prometido 1.800 dólares (1.470 euros) a la familia de cada víctima en concepto de indemnización. Los críticos dicen que gran parte del dinero se evaporará.
Arup Misra, un destacado activista ambiental y profesor en la Facultad de Ingeniería de Assam, ha denunciado que la corrupción es rampante, antes y después del desastre. "Algunos funcionarios esperan con impaciencia las inundaciones, ya que podrían hacer dinero con la reparación de diques y la distribución de ayuda", ha añadido.
Durante los últimos 60 años, las autoridades han construido diques a lo largo de la mayor parte del curso del Brahmaputra, el río más importante de Assam y cuyo caudal se nutre del deshielo del Himalaya y de las lluvias torrenciales más fuertes del mundo. Los expertos dicen que estos diques no han tenido el mantenimiento adecuado y que ha habido una gestión desacreditada de las inundaciones.
Rajiv Sinha, un experto en dinámica de los ríos, ha explicado que los diques han impedido que el río propague los sedimentos en su cauce natural, lo que causa su obstrucción y el aumento de la frecuencia e intensidad de las inundaciones. Muros de contención aguas abajo similares también han sido culpados de devastadoras inundaciones en el vecino Bangladesh.
"En los últimos 50 años, han sucedido dos cosas: el gasto en el control de inundaciones ha aumentado enormemente y, al mismo tiempo, los daños causados por las inundaciones se han incrementado de manera exponencial", ha puntualizado Sinha, quien es profesor de Ciencias de la Tierra en el Instituto Indio de Tecnología, en la ciudad de Kanpur.