JARTUM 27 Nov. (Reuters/EP) -
Una adolescente sudanesa de 16 años de edad recibió 50 latigazos después de que un juez determinase que su falda, que le llegaba hasta la rodilla, era "indecente", según informaron este viernes a Reuters la madre de Silva Kashif, Jenty Doro, y su abogado, Azhari al-Haj. Ambos anunciaron también que van a presentar una demanda contra el Policía que la detuvo y contra el juez que la condenó porque su hija es menor de edad y de religión cristiana. Las leyes sudanesas prohíben los latigazos a los menores de 18 años y el juez basó su sentencia en la ley islámica, la 'sharia'.
El caso añade más polémica al debate acerca de las leyes sudanesas sobre decencia. Este mismo año, una empleada sudanesa de la ONU, Lubna Hussein, fue encarcelada y a punto estuvo de ser latigada por llevar pantalones en público. La ex periodista ha utilizado su propio caso para denunciar las regulaciones sobre orden público y decencia de su país. Aparte, el futbolista nigeriano Stephen Worgu fue condenado este mes a sufrir 40 latigazos por conducir borracho en Jartum. La sentencia ha sido pospuesta a la espera del recurso.
Kashif, cuya familia procede de la localidad de Yambio, en Sur de Sudán, fue detenida la semana pasada mientras paseaba por un mercado cerca de su casa en el suburbio de Kalatla, en Jartum, según informó Jenty Doro. "Sólo es una joven, pero el policía la empujó por el mercado como si fuera una criminal", declaró su madre.
Silva Khashif fue trasladada posteriormente al tribunal de Kalatla, donde fue condenada y castigada de inmediato por una agente de Policía delante del juez, prosiguió la madre. "Sólo me lo dijeron cuando ya había sido azotada", lamentó. "La gente tiene diferentes religiones y eso se debe tener en cuenta", aseveró.
De acuerdo con la 'sharia', que rige la política del Gobierno, en Sudán se castigan la indecencia, la embriaquez y los delitos contra el orden público. Las autoridades se han comprometido a suavizar la aplicación de la 'sharia' para los ciudadanos de Sur de Sudán que viven en Jartum, en virtud del acuerdo de 2005 que puso fin a guerra civil entre esta región autónoma --cuyos habitantes son mayoritariamente cristianos y seguidores de religiones autóctonas-- y el Gobierno central.
El abogado de Silva Kashif, Azhari al-Haj, declaró a Reuters que se va a presentar una demanda contra el agente y contra el juez por detener y condenar a una menor de edad. Según el letrado, las leyes sudanesas prohíben los latigazos a los menores de 18 años. "Ella vestía una falda y una blusa normales, como miles de chicas", explicó. Las autoridades "no se pusieron en contacto con ningún tutor y la castigaron en el acto", agregó. Al-Haj se mostró confiado en conseguir una compensación y la absolución total de Kashif. "También estamos en contra de la ley por sí misma, queremos que se cambie la ley", aseguró.