MADRID, 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
La organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras (MSF) ha denunciado este viernes que, once días después del terremoto registrado en la región de Baluchistán, las autoridades paquistaníes aún no le han concedido el permiso para poder acceder a las zonas más afectadas para ayudar a las víctimas y damnificados por el seísmo
"Desde el mismo día del primer terremoto, Médicos Sin Fronteras solicita al Gobierno de Pakistán que se le permita acceder a las víctimas. Once días después, dicho permiso sigue sin llegar", ha denunciado MSF, en un comunicado.
La ONG ha indicado que, "a pesar de las discusiones diarias con el Gobierno de Pakistán", el Ejecutivo "sigue sin conceder permiso a Médicos Sin Fronteras para trabajar en la zona". "Desde el momento en el que se produjo el primer terremoto, el pasado 24 de septiembre, MSF ha estado
en diálogo con distintos funcionarios para poder introducir equipos y suministros en la región de Awaran. Sin embargo, el Gobierno de Pakistán no nos ha dado autorización para acceder", ha asegurado el director de Operaciones de MSF, Chris Lockyear.
"Para aquellos que hayan resultado afectados once días sin ayuda supone demasido tiempo. Es crucial que las autoridades permitan el acceso de ayuda humanitaria imparcial en la región de Awaran y que nos
dejen responder todas aquellas necesidades que no están siendo satisfechas", ha subrayado Lockyear.
MSF ha dejado claro que sus equipos han estado dispuestos a prestar asistencia médica y humanitaria en Awaran "desde el primer día", "tratando a las víctimas de traumatismos, llevando a cabo atención primaria de salud y poniendo en marcha actividades de agua y saneamiento".
"Todos los informes que han sido publicado sugieren que aún existen necesidades humanitarias sin cubrir en aquellas áreas donde la ayuda del
Gobierno no ha podido llegar", ha explicado la ONG. MSF ha indicado que ya está trabajando en otras zonas de Baluchistán, "una de las provinicias más pobres de Pakistán y una de las que cuenta con algunos de los peores indicadores de salud del país".
La organización ha asegurado que las tasas de desnutrición en algunas de las regiones de Baluchistán son "preocupantemente altas", lo que hace que "los niños sean especialmente vulnerables a la malaria o a las enfermedades provocadas por las malas condiciones higiénicas".
"Los indicadores de salud en Baluchistán ya eran muy bajos antes del terremoto. Estamos seriamente preocupados por aquellos que han sufrido el impacto del terremoto, ya que no hay duda de que su situación habrá empeorado todavía más", ha advertido Lockyear.
MSF trabaja en Pakistán desde 1986 proporcionando atención médica a las víctimas de conflictos armados y desastres naturales y aquellos que carecen de acceso a la atención médica. Actualmente, los equipos de la organización dan atención médica de urgencias gratuita en
las provincias de Kurram Agency (FATA), Jyber Pajtunjwa, Baluchistán y Sindh.
Con el fin de garantizar la independencia de sus actividades en Pakistán, MSF financia sus proyectos exclusivamente con donaciones privadas realizadas por socios y colaboradores de todo el mundo y no acepta para los mismos financiación pública de ningún gobierno.