MADRID, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -
El 73 por ciento de los menores que viven en Gaza sufren desórdenes psicológicos y de comportamiento, incluido trauma psicológico, pesadillas nocturnas, enuresis, presión alta y diabetes, de acuerdo con el estudio realizado por la ONG Ard al Insan y recogido por la agencia de noticias humanitarias de la ONU, IRIN.
"Hay un deterioro significativo del bienestar de los menores palestinos que viven en la Franja de Gaza, especialmente después de la reciente ofensiva israelí", aseguró el director del hospital psiquiátrico de Gaza, Ayesh Samour, quien afirmó que a los niños se les niega la posibilidad de vivir una infancia normal debido a la inseguridad y a la inestabilidad que viven en su ambiente.
Además, Samour afirmó que la cultura de la violencia y la muerte ha dañado su forma de pensar, y los ha convertido en niños más agresivos y enfadados. La escasez de profesionales de la salud en la Franja de Gaza y la falta de equipamiento médico significa que los niños no están recibiendo la ayuda que necesitan, aseguró.
Es el caso de Mona al Samouni, de doce años, que sufre depresión desde hace un año, cuando presenció cómo soldados israelíes disparaban contra sus padres y una serie de familiares en su casa en Zeitoun, en el sureste de Ciudad de Gaza. Como un gran número de menores que presenciaron acontecimientos horribles durante la ofensiva israelí sobre Gaza, Mona está más retraída y prácticamente no habla, una de las formas de asumir una tragedia, según los médicos.
El asesinato de la familia de Mona es uno de los incidentes más conocidos del conflicto del año pasado y uno de los sucesos que investigó la Misión de la ONU sobre la ofensiva en Gaza, "en la que las fuerzas israelíes lanzaron ataques directos contra los civiles con un resultado letal" y en la que "los hechos indican que no se perseguía un objetivo militar justificable". En el informe también se recoge que las fuerzas israelíes "mataron a 23 miembros de la familia Al Samouni" en un día.
El ministro de Sanidad en Gaza, Basem Naim, del Gobierno 'de facto' de Hamás, afirmó que los hospitales y las instalaciones de cuidados no han sido reconstruidas debido al bloqueo del territorio bajo el que Israel prohíbe la entrada de materiales de construcción.
Save the Children y el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) lanzaron el pasado 25 de enero un proyecto de centros familiares en Gaza. "El proyecto asegurará que el derecho a la supervivencia y al desarrollo de los menores en riesgo. Esto se asegura a través del establecimiento de 20 centros en diferentes comunidades", indica Save the Children.