El programa limita las ayudas a 200.000 euros por beneficiario y ayudará a elevar la producción de furgonetas un 10%
MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes un plan de ayudas a la adquisición de vehículos comerciales, denominado PIMA Aire, propuesto por el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente y dotado con un presupuesto de 38 millones de euros. El plan tendrá una vigencia de seis meses o hasta el agotamiento de los fondos.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, el titular de Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, detalló que el presupuesto del plan procede de las subastas tempranas de derechos de emisión realizadas entre noviembre y diciembre. "Los estados deben justificar periódicamente que el fin de estos fondos es la lucha contra el cambio climático", explicó.
Arias Cañete apuntó que el plan está dirigido a un mercado potencial de unos 35.000 vehículos, y su puesta en marcha tendrá un impacto de 140 millones de euros sobre la economía española, contribuyendo a elevar un 10% la producción de furgonetas en España. Además, ayudará a mantener o generar más de 700 empleos y elevará la recaudación fiscal en 50 millones de euros.
El plan consiste en un incentivo de 2.000 euros para la compra de vehículos de hasta 2.500 kilos (mil aportados por Medio Ambiente y otros mil por las marcas) y de 4.000 euros para los de más de 2.500 kilos (2.000 del Ministerio y 2.000 de las marcas) con etiquetas de eficiencia energética A, B, C ó D, a cambio de entregar para el achatarramiento vehículos de hasta 3.500 kilos con una antigüedad mínima de siete años.
Los principales beneficiarios de la iniciativa, que incluye ayudas a la compra de vehículos seminuevos (menos de un año), serán profesionales autónomos, pequeñas y medianas empresas y entidades privadas, a quienes se otorgará la subvención para que sustituyan sus vehículos por otros más eficientes. No obstante, se limita el máximo de subvenciones a 200.000 euros por cada beneficiario.
BENEFICIOS MEDIOAMBIENTALES.
El objetivo del plan es mejorar la calidad del aire, reduciendo las emisiones de gases contaminantes y de CO2. El programa es pionero en Europa y ayudará a consolidar a España como uno de los mercados más eficientes energéticamente y con menor impacto ambiental.
El ministro recordó que más del 70% de los vehículos de reparto que se utilizan para la distribución comercial en las ciudades españolas tienen más de siete años de antigüedad, y contribuyen a la contaminación en las grandes ciudades.
Con la puesta en marcha del Plan PIMA Aire, las emisiones de CO2 bajarán entre un 15% y un 20% por cada vehículo sustituido, lo que supone un ahorro de 35.000 toneladas al año. En el caso de las partículas, el descenso medio llegará al 94%, con 114 toneladas anuales, mientras que los óxidos de nitrógeno bajarán un 70%, equivalente a 725 toneladas. En conjunto, el consumo de carburante bajará un 16% (15 millones de litros al año).
Arias Cañete destacó que este plan es un ejemplo de "economía verde" con efectos positivos, que demuestra que es compatible la actividad económica con la protección del medio ambiente. Con el Plan PIMA se integran iniciativas de lucha contra el cambio climático y mejora de la calidad del aire, según el ministro.