MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores español, José Manuel García Margallo ha celebrado el "esfuerzo enorme" que, según ha explicado, está haciendo Marruecos para controlar la inmigración ilegal antes de que llegue a las fronteras españolas en África e incluso para regularizar a los inmigrantes en su propio territorio.
Según Margallo, las relaciones con el país vecino son "espléndidas" y no solo colabora sino que "colabora muy bien". Sin embargo, ha insistido en que "quien tiene que colaborar para atajar el problema de la inmigración ilegal es la UE".
El ministro español ha reconocido que la "solución definitiva" al problema pasa necesariamente por "la eliminación de la pobreza en los países de origen" y ha indicado que el acuerdo de pesca alcanzado por la UE con algunos de los países de origen "es una buena medida" en esta dirección, pero ha incidido en que el objetivo de acabar con la pobreza "no es un tema para mañana".
En esta línea, ha recordado que la frontera de España con Marruecos "es la más desigual del mundo, más incluso que la de EE.UU." y ha explicado que la diferencia de renta entre las poblaciones de ambos países "es de aproximadamente seis veces".
Además, ha señalado también que Marruecos se está convirtiendo en un país de destino para muchos inmigrantes procedentes de países en los que se vive con un dólar al día.
"Mientras haya una pobreza tan abismal en el continente, y fundamentalmente en el continente subsahariano, la tentación de venir a Europa, a la que tienen acceso a través de los medios de comunicación, es imbatible", ha sentenciado García Margallo.
Frente a esta situación, ha recordado también que "ningún país puede recibir a todas las personas que quisieran entrar" porque "el secreto de la inmigración es la integración, para que instalarse en condiciones de dignidad humana".
Por ello, ha insistido en que se trata de "un problema grave" y ha señalado que la aspiración del Gobierno es, ante la imposibilidad de atajarlo, "hacerlo más manejable de forma que los inmigrantes que lleguen se integren en condiciones de dignidad".
Con este objetivo, ha reclamado la colaboración de los instrumentos de la UE, entre los que ha destacado las medidas para "atemperar la pobreza" en los países de origen y el aprovisionamiento de recursos al servicio europeo de vigilancia de fronteras, Frontex.
"Es obvio que ni Italia y España tienen medios financieros suficientes para hacer frente a esto y la entrada a Italia y España es la entrada a la UE", ha recordado el ministro español.
Por ello, ha pedido a los países de la unión que impulsen medidas para proveer de dinero, barcos y personal a Frontex para colaborar en el control de la inmigración en la frontera sur de Europa.
Si bien no cesará el problema, "se trata de reducirlo y atajarlo al máximo", ha explicado, y ha recordado que "EE.UU. lleva años y años con muchísimos más medios que España y no ha conseguido atajar la inmigración ilegal" en su frontera con México, país con el que, según ha indicado, España va a colaborar a su vez para frenar la inmigración ilegal procedente de Guatemala.