MADRID, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la ciudad autónoma de Melilla, Juan José Imbroda, ha afirmado que el problema con la inmigración "no es la cuantía, sino la sensación de que la frontera española es vulnerable", y eso es un principio que "España no puede consentir".
En declaraciones a RNE recogidas por Europa Press, Imbroda ha asegurado que el salto de la valla se está produciendo con "mucha mas violencia que antes". "Ahora entran agrediendo a los guardias civiles que soportan esta presión, y que se ven obligados a acudir a hospitales por culpa de los inmigrantes", ha concretado.
En este sentido, ha apuntado que entiende que esta situación se produzca a causa del hambre y que este problema "no tiene solución fácil". Asimismo, considera que "la simpatía que podrían producir al cruzar la frontera se empieza a perder cuando entran violentamente".
En cuanto a las ayudas, el presidente de Melilla ha manifestado que, con una bolsa de unos 600 u 800 inmigrantes "moviéndose alrededor de la ciudad", se necesita que "todas las instituciones se crean Melilla" y a partir de ahí llegará la asistencia. Así, ha reconocido que es "difícil de entender cómo la ciudad puede soportar la entrada masiva de inmigrantes --cerca de 30.000 diarios--, sin ningún problema noticiable y con una economía que sea solvente con capacidad para tanta gente".
Respecto a la situación actual que atraviesa España, Imbroda ha reconocido que a pesar de que Melilla padece una "crisis endémica", donde el porcentaje de paro oscila entre el 20 y el 22 por ciento, en Melilla se puede "llorar por un ojo" en cuanto a las relaciones con la Administración Central puesto que son, dentro del contexto actual, unos "privilegiados". "Aunque esto no quiere decir que no se esté perdiendo dinero", ha precisado.
A la pregunta de si es posible perseguir a las mafias que trafican con seres humanos, ha declarado que se trata de "algo novedoso". Asimismo, ha subrayado que la UE tiene que "mojarse más con Marruecos y los países de origen", porque las mafias no se dan en Melilla, sino que vienen de diversos países, están muy bien organizadas y tienen conexiones dentro de España.
Por último, ha explicado que para el país es "muy importante" la relación con el reino alauí desde el punto de vista económico. "España está buscando sus intereses y en esa búsqueda el Gobierno está tendiendo una mano a Marruecos para que se desarrolle democráticamente y económicamente más rápido y al mismo tiempo colabore con la inmigración en España.", ha concluido.