MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un 21% de las universidades españolas no incluye la variable discapacidad en el diseño de los Planes de Estudios de los grados ofertados, algo que es "ilegal" según ha apuntado el director de la Fundación Universia, Ramón Capdevila, durante la presentación del observatorio 'Universidad y discapacidad' impulsado por la Fundación Universia y el CERMI y realizado por la consultora Price Waterhouse Cooper (PwC).
En este sentido, la investigación revela que frente a ese 21%, el 69% de las 48 universidades participantes en el estudio afirma haber incluido la variable discapacidad en sus planes de estudios. De ellas, un 17% dice haber considerado este aspecto en el 100% de los planes y el 52% indica que solo lo ha tenido en cuenta en las áreas de Ciencias Sociales y Jurídicas, de la Salud e Ingenierías.
En las universidades españolas estudian un total de 18.300 alumnos con discapacidad. Concretamente, el estudio ha contabilizado hasta 12.755 estudiantes con discapacidad en las universidades participantes en el observatorio, lo que representa un 1,1% del total de alumnos --porcentaje que no varía de la pública a la privada--.
Además, el informe muestra que esta cifra disminuye hasta un 0,5% en los estudios de postgrado y master (765) y hasta el 0,3% en estudios de doctorado. Asimismo, el porcentaje cae entre el personal docente e investigador, donde las personas con discapacidad representan el 0,4%.
En cuanto al perfil del estudiante universitario con discapacidad, de los datos se desprende que es el de un varón (un 52% son hombres) que tiene mayoritariamente discapacidad física y que realiza estudios o tiene actividad docente o investigadora en la rama de Ciencias Sociales y Jurídicas. Además, se trata de un estudiante que estudia a distancia, ya que en estas universidades representan el 2,1% del total de alumnos frente al 0,8% en modalidad presencial.
Así, aunque, según Capdevila, el número de estudiantes con discapacidad se ha doblado en los últimos cinco años (de 2007 a 2012), ha indicado que esto puede deberse no solo al incremento de alumnos sino al hecho de que este dato no hubiera aflorado del todo hasta los últimos años.
Respecto a las universidades, la investigación también revela que el 62% cuenta con planes de accesibilidad universal y de diseño para todos; que el 37% indican que sus páginas web cuentan con certificación de accesibilidad --más las públicas que las privadas--; y que un 29% contempla por escrito la presencia de personas con discapacidad en sus órganos de gobierno y representación.
COLECTIVO "SUBREPRESENTADO"
El presidente del CERMI, Luis Cayo, ha destacado que las personas con discapacidad siguen formando un grupo "subrepresentado" en las universidades y ha advertido de que si no hay inclusión en las etapas previas, ese "déficit" acaba arrastrándose hasta la educación superior.
No obstante, ha precisado que ven con "cierta satisfacción" que la inclusión en la universidad de las personas con discapacidad sea un asunto "en trance de ser asumido" por la comunidad universitaria, aunque el papel de este colectivo sea aún "modesto, tímido".
Además ha alertado del riesgo de que las conquistas no se mantengan debido a los recortes en las universidades como consecuencia de la crisis. "Cuando hay recursos la discapacidad aflora, cuando no, permanecen invisibles", ha añadido.
Asimismo, ha mostrado su preocupación por la situación de desempleo de los jóvenes que, "por desgracia", estima que durará mucho tiempo, y que "se duplica o triplica" en el caso de las personas con discapacidad. Sin embargo, se ha mostrado esperanzado ante el dato de que casi 1.000 personas con discapacidad se establecen cada año como autónomos, por lo que ha instado a fomentar el espíritu empresarial.