Las delegaciones del Gobierno solicitan a los ayuntamientos que extremen
la supervisión administrativa de este tipo de festejos en locales
SEVILLA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Justicia e Interior ha iniciado la campaña de control de las fiestas navideñas y de Fin de Año a fin de garantizar la seguridad de los asistentes, por un lado solicitando a los ayuntamientos que extremen la supervisión administrativa de este tipo de eventos y, por otro, mediante inspecciones de la Unidad de Policía Adscrita a la Junta en los locales donde se celebran.
Las delegaciones del Gobierno de la Junta han enviado una carta a los ayuntamientos andaluces para que los consistorios extremen los controles administrativos previos sobre los eventos que se organizan con motivo de las próximas fiestas navideñas, informa el Ejecutivo autonómico en una nota.
Así, insta a las administraciones locales a velar por el cumplimiento de todas las exigencias legales en esta materia, subrayando que los organizadores de estos eventos tienen que obtener con antelación suficiente las preceptivas autorizaciones administrativas ante los consistorios, además de cumplir todos los requisitos de seguridad reglamentarios contemplados en la normativa de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Andalucía.
En la normativa se distinguen los eventos que se celebran en establecimientos públicos que habitualmente acogen otro tipo de actividades recreativas, como es el caso de un bar que pretende organizar un cotillón, que deben solicitar expresamente autorización para celebrar esta actividad puntual considerada como "extraordinaria", por ser distinta a la habitual.
Por otra parte, se encuentran aquellos espacios que tienen usos diferentes al de la celebración de espectáculos y actividades recreativas --tales como un garaje o una nave-- y que, excepcionalmente, se pretenden utilizar para una fiesta o concierto, por lo que deben obtener igualmente autorización para ello.
En ambos casos, los ayuntamientos son los competentes para otorgar la autorización, conforme a lo establecido en la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas y el resto de la normativa reguladora de las condiciones generales para la celebración de este tipo de eventos con carácter ocasional y extraordinario.
La resolución municipal debe contener las condiciones particulares e información del titular y organizador, objeto, duración o vigencia, aforo máximo, horario u otras condiciones particulares.
Por lo que respecta a los establecimientos públicos eventuales o formados parcialmente por estructuras desmontables o portátiles destinados a celebrar espectáculos públicos y actividades recreativas ocasionales, deberán contar previamente con la preceptiva autorización de instalación municipal y reunir todas las condiciones técnicas de seguridad, higiene, sanitarias, de accesibilidad y confortabilidad y ajustarse a las disposiciones establecidas sobre condiciones de protección contra incendios en los edificios y al Código Técnico de Edificación.
CAMPAÑA DE VIGILANCIA
Además, la Consejería de Justicia e Interior lleva a cabo una campaña específica de vigilancia policial que los agentes de la Unidad Adscrita a la Junta han iniciado en el mes de diciembre y que se prolongará hasta finales del próximo enero en los establecimientos de esparcimiento, pubs y bares con música con un aforo superior a 700 personas para garantizar la seguridad en las fiestas que se organizan durante estos días.
En estas inspecciones, se comprueba la documentación general de estos establecimientos, los requisitos técnicos de sus instalaciones y se revisan aspectos importantes para la seguridad de las personas como las instalaciones eléctricas, protección contra incendios y los elementos y condiciones de evacuación del edificio.
La Junta podrá clausurar aquellos establecimientos en los que se detecten deficiencias graves hasta su completa remodelación. Los planes de inspección desarrollados anteriormente han demostrado su eficacia para corregir los eventuales incumplimientos registrados durante los mismos y su importante efecto preventivo y disuasorio, ya que las inspecciones fomentan actitudes responsables por parte de los propietarios de estos establecimientos.