En 2014 se presentaron en la región dos denuncias sobre este asunto pero no se produjeron detenciones
CÁCERES, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
Extremadura cuenta desde este lunes con un protocolo de actuación para prevenir la trata de personas con fines de explotación sexual, de manera que se convierte en la tercera Comunidad Autónoma en establecer un mecanismo gracias al cual se articula un sistema coordinado para detectar, atender o derivar a posibles víctimas y que permitirá, además, protegerlas y garantizar sus derechos.
La Casa de la Mujer de Cáceres ha sido el lugar donde se ha puesto en marcha este protocolo del que forman parte 34 asociaciones y entidades como la Administración regional, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, Fiscalía, jueces, personal sanitario, psicólogos, trabajadores sociales y diversas asociaciones que trabajarán en la prevención de este delito y en atención a las posibles víctimas.
Así, la delegada del Gobierno en Extremadura, Cristina Herrera, ha señalado que en 2014 se registraron en la región dos denuncias relacionadas con la presunta trata de blancas, pero estos atestados no concluyeron finalmente con detenciones ya que no se pudo encontrar a ningún responsable de la situación de esas dos mujeres, que se encontraban de "forma legal" en el país.
Herrera ha destacado, además, que en lo que va de año no se ha abierto ningún atestado en Extremadura relacionado con este asunto, lo que puede significar que la región "está más blindada" pero "no hay que bajar la guardia porque cualquier mujer puede caer en una red de trata de blanca", ha dicho.
Según los datos aportados por la delegada del Gobierno, el año pasado en España se detectaron 13.983 personas en situación de riesgo, la mayoría mujeres de entre 23 y 32 años, mientras que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado detectaron a 900 víctimas, de las que 153 eran de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y 747 víctimas ya de esa explotación sexual.
Además, las víctimas identificadas son mayoritariamente mujeres procedentes de Rumanía, en situación regular en España que no superan los 22 años de edad y siete eran menores de edad. Las organizaciones especializadas entraron en contacto con 67.736 mujeres en riesgo a través de unidades móviles, líneas telefónicas, visitas a pisos y locales y otros dispositivos de acercamiento.
AUNAR ESFUERZOS
Por su parte, el Fiscal Superior de Extremadura, Aurelio Blanco, ha resaltado la importancia que tiene la puesta en marcha de este protocolo porque se "aúnan esfuerzos" entre colectivos, instituciones y asociaciones para "proteger a las víctimas", que es lo "esencial" de este tema.
Desde la Fiscalía el papel que juega en este protocolo es, según ha explicado Blanco, "asegurar las pruebas para poder abrir un proceso judicial que pueda llevar a detenciones y sentencias contra los individuos que están implicados en este grave delito".
Finalmente, la directora general en funciones del Instituto de la Mujer de Extremadura (IMEX), María José Ordóñez, ha resaltado que este protocolo llega después de varios años de trabajo en el que se han desarrollado campañas de información y sensibilización contra esta lacra, que ha definido como "una forma moderna de esclavitud".
Cabe recordar que la trata de personas es el tercer negocio ilícito del mundo, junto con el tráfico de drogas y de armas, un negocio que mueve 4.800 millones de euros al año, y cuya mayoría de las mujeres víctimas tienen entre 18 y 30 años y, en algunos casos, son incluso menores de edad.
Según datos de la ONU, unos 2,5 millones de personas son tratadas o traficadas en el mundo cada año, y más de medio millón de personas son introducidas al año en Europa occidental con fines de explotación sexual.