BADAJOZ, 24 Abr. (EUROPA PRESS) - El presidente del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago, ha calificado de "reto" buscar el "equilibrio" entre economía y conservación del medio ambiente en la dehesa extremeña, que debe incorporar la innovación para que sea "un campo del siglo XXI". "La dehesa extremeña es mucho más que un paisaje característico de nuestra tierra y estamos aprovechando este recurso al máximo, al tiempo que estamos poniendo todos los mecanismos necesarios para proteger el ecosistema porque buscamos el equilibrio entre economía y conservación del medio ambiente, ése es el principal reto al que nos enfrentamos", ha señalado Monago. Sobre este "reto", ha matizado que "en ningún caso puede entender un elemento con el otro como elementos excluyentes", a la vez que ha considerado que la dehesa y quienes trabajan en y por ella merecen que entre todos se conserve y se mejore esta "seña de identidad" que supone un "hecho diferencial" de la comunidad extremeña. El jefe del Ejecutivo autonómico ha manifestado la "necesidad" de modernizar el campo extremeño y ha valorado que la "innovación debe irse implementando hasta que constituya la base de la actividad diaria que se lleva a cabo en la dehesa", de forma que se facilite el trabajo en las explotaciones y que el extremeño "sea un campo del siglo XXI". Monago ha asegurado que la dehesa extremeña es "sinónimo de crecimiento" y "uno de los principales motores de desarrollo económico de Extremadura" durante su intervención en la clausura el II Congreso Ibérico de la Dehesa y el Montado que ha tenido lugar en la Institución Ferial de Badajoz (Ifeba) y en la que también han estado presentes el consejero de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, José Antonio Echávarri, y el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso. El presidente extremeño ha felicitado a los organizadores del congreso y a quienes han participado en el mismo, al tiempo que se ha referido a los "vecinos portugueses" que "un año más se han volcado con esta iniciativa haciendo que este congreso no sea sólo nacional, sino ibérico". Al respecto, ha apuntado que en el campo hay "muchos intereses y retos comunes" y que aliarse es "la mejor opción para hacerles frente", y ha agradecido al conjunto de los participantes por compartir experiencias e impresiones y "contribuir, con ello, a buscar alternativas y soluciones a los desafíos a los que se enfrenta nuestra dehesa y nuestro entorno rural". José Antonio Monago ha detallado que la dehesa extremeña supone más del 34 por ciento de la superficie total de la región con 1,5 millones de hectáreas y que el 95 por ciento de las dehesas extremeñas son de propiedad privada, por lo que se trata de "unas explotaciones de las que viven muchas familias". En este sentido, ha recordado que todas ellas tienen a su disposición "otros 44 millones de euros más hasta 2020 además de los 22,5 millones de euros" que se han destinado en esta legislatura a ayudas a la dehesa. Así, ha cifrado en unos 2.000 los titulares de explotaciones que se pueden beneficiar de esta cantidad con la que se pretende actuar en unas 50.000 hectáreas y ha dicho que, con esta inversión, se pretenden generar 850 empleos anuales y 30.000 jornadas de trabajo cada ejercicio. A este respecto, el director general del Centro Extremeño de Investigaciones Científicas y Tecnológicas de Extremadura (Cicytex), Germán Puebla Obando, ha hecho hincapié en que este congreso "ha sido un punto de inicio para hablar de la dehesa en Extremadura", un sistema productivo "basado en el aprovechamiento ganadero" y "absolutamente competible con el medio ambiente". "Si no fuera por el ganado, en esta dehesa tendríamos un bosque, el bosque que alguien en algún momento ha pretendido que tuviésemos", ha agregado Puebla Obando, quien ha opinado que, para defender lo que se quiere y en lo que se cree, "hacen falta" pasión y conocimiento que "han estado absolutamente representadas en este congreso".