MÉRIDA, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Fundación Computación y Tecnologías Avanzadas de Extremadura (Computaex) ha puesto en funcionamiento Lusitania II, el nuevo supercomputador extremeño que "actualiza y complementa los recursos de cómputo, procesamiento y almacenamiento ya disponibles".
Así, estos recursos "se ponen a disposición de las instituciones, la comunidad científica y el tejido productivo de todo el país", según ha informado la Junta de Extremadura en nota de prensa.
El nuevo supercomputador "destaca principalmente", desde el punto de vista técnico, por la incorporación de un clúster de memoria distribuida compuesto por cuarenta servidores con procesadores Intel Xeon a 2,6 GHz, con un total de 800 cores y 3,2 terabytes de memoria.
Estas características técnicas encuentran cabida "en un espacio físico bastante más reducido" que el del Lusitania original. Además, Lusitania II incrementa la capacidad de la red de cómputo, que se multiplica por cuatro, de los diez a los cuarenta gigabytes por segundo.
Asimismo, se incorpora a este supercomputador "un nuevo nodo de memoria compartida" que incrementa la capacidad de cómputo de Lusitania, con una nueva máquina de 48 cores y 1,5 terabytes de memoria, que permitirá a Computaex "disponer de una mayor capacidad de computación en problemas que requieran este tipo de procesamiento para su resolución".
Para el secretario general de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Junta de Extremadura, Jesús Alonso, la nueva infraestructura de supercomputación "contribuirá a reforzar" el Sistema Extremeño de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Así, Lusitania II proporcionará a los investigadores "un potente recurso para el desarrollo de nuevos proyectos y a las empresas la posibilidad de usar en mayor medida la innovación como factor de competitividad que fortalezca su posición en los mercados".
"FORTALECER Y COMPLEMENTAR"
Por su parte, el director general de Computaex, José Luis González, ha subrayado que Lusitania II viene "a fortalecer y complementar las capacidades de Lusitania y no sólo mejora la velocidad de procesamiento de datos y la capacidad de almacenamiento de su predecesor".
Además, José Luis González ha explicado que Lusitania II "es capaz de ofrecer servicios de alta disponibilidad, que proporcionan cotas de fiabilidad verdaderamente extraordinarias, tanto para servicios de cómputo masivo como para big data y cloud computing".
El director general de Computaex ha firmado que con estas "nuevas posibilidades a partir de ahora Computaex podrá proporcionar a los investigadores y tecnólogos un recurso capaz de satisfacer requerimientos que antes no podía atender".
También se potencia la Instalación Científica-Técnica Singular (ICTS) que el Centro Extremeño de Investigación, Innovación Tecnológica y Supercomputación (CénitS) aporta a la Red Española de Supercomputación.
De igual modo, el computador ha sido instalado en un "contenedor móvil", lo que permitirá "investigar cómo mejorar la eficiencia energética en los centros de proceso de datos o explorar las nuevas potencialidades que proporciona la movilidad, monitorización y modularidad de centros de proceso de datos en explotación".
Esta característica "singular" para un supercomputador hace posible su traslado a una nueva ubicación para "atender situaciones de crisis o cuando se requieran grandes capacidades de cálculo para el seguimiento cercano de acontecimientos complejos".
Lusitania II ha supuesto una inversión de 517.152 euros, cofinanciada al 80 por ciento con Fondos Feder que aporta el Ministerio de Economía y Competitividad a cargo del subprograma de Proyectos de Infraestructura Científico-Tecnológica (2010-2011). El 20 por cierto restante ha sido financiado con fondos propios de la fundación Computaex.