El Programa de Inteligencia Emocional se amplía a 20 institutos tras los "excelentes" resultados en los centros piloto

MÉRIDA 15 Ene. (EUROPA PRESS) -

El director general de Política Educativa de la Junta de Extremadura, Felipe Gómez Valhondo, inauguró esta mañana, en el Centro de Profesores y Recursos (CPR) de Mérida, la jornada de trabajo sobre el Programa de Inteligencia Emocional a la que asistieron medio centenar de responsables de unos 20 centros educativos.

En estos centros desarrollarán este curso el Programa de Aprendizaje Social y Emocional cuyo pilotaje concluyó con "éxito" el pasado curso en tres institutos y un colegio de Primaria de la región.

Según informa el Gobierno regional en nota de prensa, Gómez Valhondo señaló que los resultados obtenidos en los centros pilotos "han sido excelentes", ya que se ha producido un "mayor autocontrol del alumno, mayor rendimiento educativo del mismo y el perfeccionamiento de las habilidades sociales en el propio profesorado, que trabaja con un alumnado con intereses y motivaciones distintas".

Extremadura es la primera Comunidad Autónoma que desarrolla este programa de forma "estructurada y general" para toda la comunidad educativa, según afirmó Felipe Gómez, quien dijo que los objetivos prioritarios buscados son la mejora de la convivencia, donde la región extremeña es la que "mejor herramientas tiene a nivel nacional", y la del éxito educativo.

En este sentido, manifestó que desde que se asumieron las competencias educativas hasta ahora, la educación extremeña es "la que mejores resultados ha tenido en la evolución de la tasa de titulados y es la segunda con mejor evolución en la tasa de abandono escolar prematuro".

El programa cuenta con la novedad de aglutinar al profesorado de los centros implicados, a las familias y al alumnado a la hora de trabajar la inteligencia emocional.

El proyecto piloto de Aprendizaje Social y Emocional, desarrollado durante el curso 2007/08 en los institutos 'San Fernando' de Badajoz, 'Sáenz de Buruaga' de Mérida y 'Maestro Gonzalo Korreas' de Jaraíz de la Vera y en el CEIP 'Ramón y Cajal' de Plasencia, fue diseñado exclusivamente para los centros extremeños, adaptándolo a sus características y necesidades.

Con este proyecto se trabajaron las cinco áreas de la Inteligencia Emocional, la autoestima, el control del estrés, la motivación, la empatía y las habilidades sociales.

Mejorar la comunicación entre los miembros de la comunidad educativa, contribuir al rendimiento académico, minimizar los incidentes por mala conducta, aumentar la tasa de asistencia a clase y conseguir relaciones más positivas, así cómo estimular la creatividad y la motivación de todos los agentes fueron los objetivos del programa piloto desarrollado el pasado curso con la participación de unas 300 personas, miembros de las comunidades educativas de los citados centros, añade la nota de la Junta.

Asimismo, explica que los programas de Inteligencia Emocional "triunfan en el panorama empresarial desde hace diez años, en Europa, Japón y Estados Unidos", y comienzan a ser "claves" en sus sistemas educativos "debido en parte a la oleada de agresividad y mala conducta detectada en las aulas, pero el proyecto implantado en centros extremeños es el primero que contempla acciones concretas para toda la comunidad educativa, alumnado, profesorado y familias".

RESULTADOS DEL PROYECTO PILOTO

En cuanto a los resultados más significativos de la experiencia piloto, la Administración regional destacó el incremento de la implicación del profesorado en la vida del centro, ya que el 62,5 por ciento del profesorado participante mostró un mayor interés en participar en la vida activa del centro así como en colaborar con los equipos directivos para la mejora en la gestión académica.

También aumentó el ejercicio de autoridad, ya que un 45,75 por ciento del profesorado optimizó su capacidad de controlar el grupo en clase, un 6,25 por ciento más que antes de que comenzara el programa.

Además, disminuyeron los casos de baja autoestima y depresión, como demuestra que 39,6 por ciento del profesorado afirmase, tras finalizar el proyecto, haber obtenido una valoración de sí mismos mucho mayor que antes de seguir el programa. En un 50,6 por ciento del profesorado se ha podido reconocer mayor control del estrés, mejor comunicación interpersonal y más liderazgo.

ACTITUD "POSITIVA" DEL ALUMNADO

Por parte del alumnado, se consiguió una actitud "más positiva y equilibrada", así como el fomento de la cooperación. Así, el 73,5 por ciento del alumnado ha mejorado su vocabulario y su cortesía en el aula y el 54,6 por ciento ha mostrado mayor colaboración en las tareas del hogar, explica la Junta.

En cuanto a la disciplina, un 53,4 por ciento del alumnado "mejoró su capacidad de seguir instrucciones docentes, así como su puntualidad y orden".

También disminuyó el absentismo escolar, ya que un 13,5 por ciento del alumnado redujo un absentismo "persistente" convirtiéndolo en "faltas ocasionales"; ha mejorado el rendimiento escolar y las calificaciones de un 52 por ciento del alumnado que siguió el programa; y el 74,8 por ciento del alumnado ha mejorado el control de la ira y la capacidad para expresar opiniones.

Por lo que respecta a las familias, la Junta indicó que se logró aumentar su colaboración, de forma que el 85 por ciento de las familias con hijos incluidos en el programa han participado activamente con un "alto compromiso" de colaboración.