BILBAO, 23 Feb. (OTR/PRESS) -
La banda terrorista ETA también ha inaugurado la campaña electoral de cara a los comicios del 9-M con sus métodos habituales. A las doce del mediodía de hoy, un artefacto que podría contener entre 3 y 4 kilogramos de explosivos, estalló en un repetidor de telefonía del Monte Arnotegi, a escasos kilómetros de Bilbao. Aunque un comunicante anónimo advirtió de su existencia con horas de antelación, se trataba de una bomba-trampa contra la Ertzaintza, según informó la propia Policía Autonómica, pues explotó cuando el robot artificiero trató de manipularla para su desactivación, sin que se produjesen heridos.
A las 9.00 horas de la mañana de hoy un comunicante anónimo advirtió al servicio de ayuda en carreteras DYA de la colocación de un artefacto explosivo en un repetidor del Monte Arnotegi, en las cercanías del Pagasarri, a escasos kilómetros de la capital vizcaína. El comunicante, que llamó en nombre de la banda terrorista ETA anunció que la bomba estallaría una hora después, sobre las 10.00 horas de la mañana.
En el lugar de los hechos se desplegó un operativo de varias dotacoines de la Ertzaintza, que acordonó la zona cercana al edificio donde se encuentra el repetidor de telefonía del citado monte. Sobre las 12.00 horas, cuando el robot de los artificieros trató de manipular el artefacto explosivo para su desactivación, la bomba estalló levantando una columna de humo blanco que podía verse desde varios kilómetros de distancia y dañando dos canales de las emisoras internas de la Policía Municipal de Bilbao.
Según la Ertzaintza, que, a falta de mayores análisis, estimó que el artefacto estaba compuesto por tres o cuatro kilogramos de explosivo sin determinar, la bomba, introducida dentro de una caja de cartón, era una "trampa" contra los artificieros de la Policía Autonómica, pues disponía de un sistema antimovimiento preparado para estallar en el momento en que fuera manipulada. En todo caso, no se produjo ningún herido y los daños a la infraestructura del repetidor fueron menores.
UNA TRAMPA SINIESTRA
El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras participar en una localidad de Sevilla en un acto de UGT, condenó el atentado y destacó que "sólo la profesionalidad y la inteligencia de la Policía Autónoma vasca han hecho que no cayeran en esa siniestra trampa de ETA". Tras comprometerse a que los responsables de la acción terrorista "serán detenidos y acabarán, como ha pasado en los últimos comandos, ante la Justicia", Rubalcaba subrayó que, una vez que ETA ha roto la tregua, resulta claro que "quiere estar presente, y parece evidente que, tras los sucesivos fracasos que han tenido, tienen excitados sus peores instintos".
Por su parte, el secretario general del PP, Angel Acebes, advirtió, durante un mitin en Zaragoza, que mientras ETA "no esté completamente derrotada tiene capacidad para poner bombas y matar". Además, el número dos del PP no dudó en volver a criticar la política antiterrorista del Gobierno y afirmó que el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, "no dijo a los españoles que iba a cambiar la política antiterrorista y a buscar un proceso de negociación con ETA", la banda que "hoy ha vuelto a poner una bomba en un repetidor".
Un paso más allá fue el portavoz adjunto del PP en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, que calificó de "desproporcionadas" las advertencias de Rubalcaba de que ETA podría atentar en la campaña electoral. A su juicio, el ministro habló así tras activar la alerta terrorista para la campaña electoral porque eso podría "suponer votos" para el PSOE, al tiempo que acusó al Gobierno de "querer lavarse la cara" con detenciones y encarcelamientos "según la conveniencia política" después de negociar con ETA y "mentir" al Parlamento.