MADRID, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Nacional para la Defensa de los Animales (ANDA) y Animals'Angels han alertado de que más de la mitad de las vacas gallegas están "prácticamente reventadas" y piden mejorar su bienestar, después de haber realizado una inspección en diversas zonas lecheras de Galicia.
Para realizar esta investigación, cuatro personas han estado visitando granjas lácteas y estudiando el estado de los animales durante cuatro días. Según las ONG, las vacas lecheras son animales "desahuciados" que "malviven" en los establos, sin acceso a pastos y con condiciones higiénicas "deplorables".
Además, apuntan que estas condiciones ponen en riesgo no solo el bienestar de los animales, sino también la seguridad alimentaria, ya que muchas de estas vacas de "desvieje" en pésimo estado acaban en mataderos y, por lo tanto, en consumo cárnico.
Por todo ello, las ONG defienden que el sacrificio de estos animales debe realizarse desde el momento en el que se detecta que su "baja" calidad de vida les provoca sufrimiento y sus condiciones físicas no les permitan desarrollar una "actividad normal".
Además, defienden que "no está justificado" mantener con vida a estas vacas, por un aprovechamiento lácteo o cárnico marginal, al no poder garantizar una vida digna a los animales.
Las ONG también han indicado que esta "problemática" en las explotaciones se enlaza con la existencia de mercados de ganado donde todavía se admite a estos animales desahuciados, con el sufrimiento añadido de los transportes hasta el mercado y desde el mercado al matadero para unos animales en condiciones límites.
Por ello, las ONG ya han realizado inspecciones de los mercados de ganado de Santiago y Silleda detectando el problema de la existencia de mercados donde se admite estos animales y lo ha comunicado a las autoridades de la Xunta y gestores de los mercados.
"Estas vacas tendrían que haber sido enviadas al matadero mucho antes de llegar a este deterioro físico lamentable y, de llegar a esta situación, sacrificarse directamente en la granja evitándoles el sufrimiento añadido de un transporte que supone un enorme riesgo para unos animales que se mantienen en pie de milagro. El entramado de funcionamiento de transportistas, mercados de ganado e industria cárnica no ayuda a solucionar el problema", ha indicado el portavoz de las ONG, Alberto Díez.