Casi una cuarta parte de las fosas que hay en Galicia siguen sin abrir 36 años después de la muerte de Franco

Mapa De Fosas En Galicia
EUROPA PRESS/GOBIERNO DE ESPAÑA
Actualizado: sábado, 31 diciembre 2011 15:03

"Temor" a que Rajoy use la crisis como "excusa" para "privar de ayudas" en los colectivos de recuperación de la Memoria Histórica

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 31 Dic. (EUROPA PRESS) -

Casi una cuarta parte de las 49 fosas con víctimas de la Guerra Civil localizadas en Galicia --un total de 12-- todavía no han sido abiertas 36 años después de la muerte del dictador Francisco Franco, aunque las familias y las diferentes asociaciones destacan el avance en la recuperación de los restos y la dignificación que ha supuesto el impulso de la Ley de Memoria Histórica.

El mapa que recoge la web del Gobierno de memoria histórica revela que las fosas no intervenidas, con víctimas de fusilamientos, están en Valdoviño (A Coruña); en las localidades lucenses de Seoane do Caurel, Remeite, Candedo, Guitiriz y O Incio; en Campobecerros, Pentes, Soulecín --Ourense--; y en las localidades pontevedresas de Filgueiras, O Porriño y San Andrés de Xeve.

Con todo, los datos que recoge esta web, que ofrece también información exhaustiva sobre el origen del enterramiento, su descripción en la historia, así como el número de víctimas, constata que otras 19 han sido totalmente exhumadas y la intervención ha permitido recuperar los restos humanos de un total de cien víctimas.

En otros cuatro casos los huesos han sido exhumados parcialmente, mientras que los cadáveres de un total de 12 fosas fueron en su momento trasladadas al Valle de los Caídos. También se han detectado dos fosas --en Baralla (Lugo) y en Tameiga (Ourense)-- que se dan por desaparecidas pese a que hay constancia histórica de su existencia.

Por comunidades, Galicia se sitúa en un puesto intermedio de la tabla en relación al número de fosas localizadas. Así, encabezan el listado autonomías como Aragón --con 595 fosas detectadas--, Andalucía (539), o Asturias (321), mientras que en polo opuesto están las Islas Baleares y las Canarias, con cuatro en cada uno de los casos, Murcia, con seis, o Cantabria, con siete.

VÍCTIMAS DE FUSILAMIENTOS

Tras cada fosa localizada hay una historia, pero en la mayoría de los casos tienen en común que los huesos recuperados pertenecen a víctimas de fusilamientos realizados en los primeros años de la Guerra Civil y que los asesinados son, casi siempre, hombres. Una de las pocas excepciones se da en una fosa ubicada en As Pontes (A Coruña), donde se entregaron a las familias los restos de tres hombres y una mujer.

De las 19 que han sido exhumadas en su totalidad y en las que las distintas entidades llevaron a cabo las labores de recuperación han localizado un centenar de víctimas, el mayor número de restos identificados responde a la situada junto al atrio de la Iglesia de Santa Mariña de Xinzo, en Ponteareas (Pontevedra), con 17 personas identificadas; a la de O Acevo, en Fonsagrada (Lugo) con 13; y a la del Cementerio de Tenorio, en Cotobade, con 11.

En el caso de los restos de Xinzo, entre los que podrían encontrarse restos de personas inhumadas con anterioridad en el cementerio parroquial, por decisión de los familiares desaparecidos, fueron depositados en un nicho conjunto en el cementerio de Pereiro. Por su parte, las víctimas de Fonsagrada fueron trasladadas al cementerio de esta localidad.

A los 'homiños de Boimorto' corresponden los restos exhumados en Ortoño, en Ames (A Coruña). Se trata de seis hombres que aparecieron muertos en la Curva dos Batáns, lugar en el que se colocó en el año 2007 una placa conmemorativa optando por la dignificación de la fosa. También se ha dignificado la fosa de Baiona (Pontevedra), en A Volta dos Nove, con nueve víctimas identificadas.

En O Amenal (O Pino), donde se localizaron cinco víctimas, los trabajos se realizaron en 2008 y la información de la web del Gobierno revela que fueron los vecinos de la aldea quienes se encargaron de los enterramientos, de forma que las fosas fueron "cuidadas y respetadas" hasta hace 20 años. A su vez, en O Vicedo (Lugo), se pudieron recuperar los cadáveres de dos hombres que huyeron al monte en 1937 y que fueron asesinados en el Monte de A Penela.

Un caso significativo es el de la fosa de Vilavella, en Triacastela (Lugo), donde fueron enterrados tres guerrilleros muertos en un enfrentamiento con la Guardia Civil. Formaban parte de un grupo de 'maquis' que quedó cercado en noviembre de 1943 y una cuarta persona logró huir. Según recoge la información de esta fosa --exhumada en agosto de 2010--, la Guardia Civil expuso al público los cadáveres, por lo que los vecinos recordaban dónde estaban enterrados.

MOVER LOS RESTOS, A DEBATE

Entre las asociaciones que acostumbran a apoyar a los colectivos y entidades que asumen la labor de exhumación se encuentra la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica da Coruña, si bien su presidente, Fernando Souto, constata que no constituye un asunto "exento de debate" puesto que hay quien defiende la recuperación de los cuerpos y otras voces que apuestan con la "dignificación" sin un desplazamiento.

Sobre la mesa pone estas dos posturas el presidente de la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica da Coruña, Fernando Souto, quien ha remarcado que, en muchas ocasiones, el mero hecho de mover unos restos supone "eliminar las pruebas de un genocidio" y que, en la línea de la recuperación de los cadáveres, vislumbra la necesidad "católica" de las familias de recuperar los cadáveres y poder darles sepultura.

Con todo, incluso en la exhumación, las familias tienen "opciones" de intentar acometer acciones legales, aunque Souto constata que, en la mayor parte de los casos, los familiares de las víctimas lo único que desean en "acabar con el proceso" o bien los jueces optan por decir "que no son competentes".

PROTOCOLO DE EXHUMACIÓN

Sobre las labores de recuperar los restos, el presidente de esta asociación también ve con ojos críticos que, en muchos casos, se encarguen de intervenir las fosas entidades privadas con sus equipos de excavación y no el Estado "con un protocolo más rígido". "Hay que ir por el camino de hacer los trabajos con garantías y no a través de iniciativas privadas movidas por la buena voluntad", ha esgrimido Souto, en declaraciones a Europa Press.

En cualquier caso, tras la aprobación de la Ley de Memoria Histórica, el Gobierno publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y mantiene en el portal web que se ocupa de esta cuestión un protocolo para la apertura y exhumación de los restos en fosas comunes en los que se determina los pasos a dar para acometer esta tarea interdisciplinar.

Entre los especialistas requeridos incluye a historiadores, arqueólogos y expertos forenses, pero también aboga por "procurar" la participación de Institutos de Medicina Legal y universidades. Igualmente, concreta las autorizaciones precisas y señala que los hallazgos se pondrán "inmediatamente en conocimiento" de las administraciones, de la Policía o Guardia Civil, así como del Juzgado de Instrucción competente.

"INDEFINICIÓN" DEL PP

Con un buen número de retos en la cabeza, con "el recurso de la memoria" para buscar un modelo de sociedad "mejor", y sin dejar de "mirar al pasado con vistas al futuro", el presidente de la Comisión pola Recuperación da Memoria Histórica da Coruña tiene claros los avances que supuso la Ley de Memoria Histórica y teme la "indefinición" del PP.

Con todo, prefiere esperar a ver la actuación del próximo presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, antes de dar por hecho "un retroceso" y espera que la línea "más dura del PP", la que ve "un revanchismo y un guerracivilismo que no existen", no se imponga.

Eso sí, Fernando Souto tiene claro que España pasa por una situación económica difícil, lo que podría "servir de excusa" al nuevo Ejecutivo para "privar de todo tipo de subvenciones" a los colectivos que trabajan en la recuperación de la memoria histórica.