Un estudio defiende la viabilidad de instaurar una renta básica universal de casi 900 euros en 15 años en Galicia

SANTIAGO DE COMPOSTELA 14 Dic. (EUROPA PRESS) -

Un estudio elaborado por la Oficina de Dereiros Sociais de Coia-Vigo y Baladre defiende la viabilidad de instaurar una renta básica universal, de casi 900 euros, que alcance al total de la población gallega en 15 años.

El documento, titulado 'Repartindo a nosa riqueza?' propone aumentar los impuestos a grandes fortunas y grandes empresas y detraer recursos de defensa y la Iglesia, así como eliminar otras prestaciones dirigidas a personas en paro y en situación de exclusión social para concentrar los recursos en esta renta básica "individual, universal e incondicional" para todos los ciudadanos.

"El estudio quiere demostrar la viabilidad tanto política como económica de la propuesta de renta básica de las iguales, que es una cuantía periódica que recibiría cada persona en Galicia por el mero hecho de nacer", ha explicado uno de los responsables de ODS-Coia, Diego Lores.

Lores ha indicado que una parte, el 80%, lo percibiría la persona y el resto se destinaría a un fondo social, gestionado por comunidades para las necesidades de la gente en riesgo de exclusión. La cuantía debe ser igual a los ingresos que se consideran el límite para estar en situación de pobreza. De acuerdo con los datos de 2011 de Galicia, la cantidad ascendería a 880 euros.

"Es algo posible, no una utopía, y lo demostramos económicamente", ha defendido Lores, que ha explicado que la implantación se realizaría en tres fases de cinco años cada una, de modo que la primera atendería a las personas en situación de emergencia social: los desempleados, las víctimas de violencia machista, las personas con discapacidad, los sin techo y los presos.

En una segunda etapa se extendería a jubilados y pensionistas y a trabajadores no especializados o de sectores como la construcción y la industria, mientras que la tercera integraría progresivamente a empleados de otros servicios, funcionarios, titulados o directivos. En el primer escalón la ayuda necesaria sería el 19,5% del producto interior bruto (PIB) de Galicia; en el segundo se sumaría el 21,5% y en el tercero se agregaría otro 9%, hasta alcanzar el 50%.

"Lo único que hace falta es voluntad política", ha asegurado Lores, que ha indicado que Alternativa Galega de Esquerda (AGE) se ha interesado por el trabajo. Además, esperan que el debate al respecto prenda en la sociedad para promover iniciativas legislativas populares.