El líder del PPdeG se reivindica como "el único presidente constitucional de una nacionalidad histórica en España"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
La decisión del presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, de no pugnar por suceder a Mariano Rajoy al frente del PP estatal ha marcado el pleno de esta semana en la Cámara autonómica y, con especial intensidad, la sesión de control de este miércoles en la que el también líder del PPdeG ha desvelado que él se ve en Galicia hasta 2020 "como mínimo".
Después de que su anuncio de que se quedará en la Xunta frenase cualquier hipotético movimiento en su partido encaminado a la sucesión en el PPdeG, que ahora queda pospuesta y mientras la dirección apuesta por centrarse en trabajar para las elecciones municipales, dirigentes populares han incidido ya en que Feijóo podría volver a presentarse a las próximas autonómicas.
De hecho, su número dos en el PPdeG, Miguel Tellado, afirmó en la pasada jornada que él mismo se lo pediría. Este martes, Feijóo ha dejado la puerta abierta al afirmar que prevé seguir en Galicia "como mínimo" hasta 2020, si bien lo hizo de forma indirecta y a través de un guiño al portavoz parlamentario del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga.
Fue durante un debate sobre la política forestal, cuando Feijóo llamó a Leiceaga a un consenso. "Ahora que usted y yo vamos a estar en Galicia hasta 2020 como mínimo", le ha propuesto el jefe del Ejecutivo, antes de agregar: "Yo creo que usted merece estar más tiempo porque es un activo para el PSdeG".
Previamente, Leiceaga había reconocido a Feijóo que se "equivocó" en la pasada sesión de control al dar por hecho su marcha a Madrid y el presidente gallego bromeó con que él también retiraba lo de que no sabía si el actual portavoz seguiría en su puesto 15 días después.
Feijóo, asimismo, contrapuso la "estabilidad" que da la mayoría absoluta del PP con la "incerteza" del PSdeG; a lo que Leiceaga le ha respondido que quizás, dada la media docena de candidatos que pugnarán por suceder a Rajoy, "no sea el mejor momento" para reivindicar la estabilidad en el partido.
"AGENDA GALLEGA"
En todo caso, Leiceaga, al igual que el resto de portavoces de la oposición, han instado al presidente gallego a "centrarse" en trabajar por Galicia una vez que ha decidido quedarse en la comunidad.
"Demuestre que se queda para ejercer como presidente de la Xunta e impulsemos una agenda gallega que fue incapaz de defender ante Rajoy", ha instado la portavoz del BNG, Ana Pontón, quien ha incluido en esa agenda demandas como el traspaso de la AP-9, la incorporación al patrimonio público del Pazo de Meirás, una tarifa eléctrica gallega, el AVE o los 180 millones "que el Estado debe a Galicia en dependencia".
Eso sí, ha advertido que espera que no cambie "sus años de servilismo" por pasar ahora a "usar Galicia como arma del PP para hacer oposición en Madrid", en un "pimpampúm" que los populares, ha augurado, protagonizarán porque están "enrabietados" tras perder el poder. "Eso sería caer en la más vieja de las políticas: decir una cosa cuando gobiernan los suyos y otra, cuando lo hace otro color político", ha advertido.
"PRESIDENTE CONSTITUCIONAL"
Si Pontón ha ironizado con que anunció que no se iba "en perfecto español" y ha insistido en que ahora que "deja de ser rehén" de su partido debería impulsar "una agenda gallega", Feijóo le ha replicado que la agenda del BNG está marcada por "intentar ganar el protagonismo que le negaron las urnas", mientras la suya apuesta por "resolver los problemas de los gallegos".
"Yo no tengo más agenda que Galicia ayer, hoy y mañana. Y no la cambio por ninguna otra. Tenemos agenda gallega y exigiremos que se cumpla", ha sentenciado, en la línea del mensaje que trasladó a Leiceaga cuando ratificó que se reunirá con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en julio.
Enfrente, ha afeado al BNG adoptar una postura "diferente" cuando gobernaba con el PSdeG en Galicia y era "socio" de los socialistas en el congreso. "Entonces votaron en contra del traspaso de la AP-9 y tener un 8% del total del presupuesto estatal era idílico. Entonces también cambiaban el cupo por la cooperación inteligente", esa es su biografía".
Feijóo ha aprovechado para advertir que no admitirá "reformas constitucionales exprés" para "apuntalar a los socios precarios" del PSOE en Madrid. "Voy a ser, soy y seré el único presidente constitucional de una nacionalidad histórica en España. Mi futuro lo decidieron los gallegos y mis energías donde siempre estuvieron es en Galicia", ha recalcado.
Sobre su uso del castellano en la intervención en la que anunció que se quedaba en Galicia, ha replicado que él es "español" y, como tal, tiene "el deber y la obligación" de conocer esta lengua. "Nuestra forma de ser españoles y gallegos es hablar en España castellano y en Galicia, gallego", ha esgrimido, antes de instar a Pontón a "no confundir Galicia con el BNG".
"PREFIERO SER PRESIDENTE DE LA XUNTA"
"Nunca engañé a los gallegos y no lo voy a hacer; los gallegos son listos. Hay vida inteligente, votan libremente y cada cuatro años entienden que el BNG es lo peor para el país", ha sentenciado y, ante el malestar generado en las filas nacionalistas, ha esgrimido que recordar los resultados electorales no supone, a su modo de ver, "una falta de respeto".
"Me critican por ser coherente, primero porque me iba y después porque me quedo. Prefiero ser presidente de la Xunta y renunciar a ser candidato a la Presidencia del Gobierno que renunciar a la palabra dada a los gallegos", ha garantizado el presidente, quien en su posterior debate con Villares también fue objeto de las pullas del portavoz de En Marea, Luís Villares, en relación a su decisión de no optar a liderar el PP.
"MEJOR LA RÍA DE AROUSA QUE EL MANZANARES"
Así, en tono jocoso, Villares le ha preguntado "cómo le fue por Madrid". "Breve pero intenso, ¿no?", le ha interpelado, antes de afirmar que En Marea celebra "que se quedase". "En Madrid hace un calor asfixiante... Donde haya un buen paseo por la Ría de Arousa que se quite el Manzanares, pero, eso sí, echando crema para evitar el melanoma", ha ironizado.
Villares también bromeó posteriormente con el retiro "dorado" de Feijóo, en evidente alusión a las fotografías de los años 90 en las que el actual líder del PPdeG salía acompañado del histórico contrabandista Marcial Dorado.
Feijóo se limitó a recordar al dirigente rupturista que estaba en el Parlamento, que hay que "respetar" la institución, y le conminó a no confundir el escenario "con una asamblea" de En Marea. "Usted ve a 70 personas y ya se cree que está en una porque le va menos gente", ha esgrimido el líder del PPdeG, quien ha advertido a Villares que "de tanto mentir ya no le creen ni los suyos".