SANTIAGO DE COMPOSTELA 25 Oct. (EUROPA PRESS) -
La empresa santiaguesa Centro de Investigaciones Submarinas diseñó una herramienta de identifica objetos hundidos en el mar para su uso en la investigación de la arqueología subacuática, de forma que convierte una tarea tradicionalmente manual en semiautomática.
Según informó hoy la Consellería de Innovación e Industria, los responsables del proyecto consideraron necesaria esta herramienta porque la búsqueda de restos en el mar es "demasiado costosa" y porque el patrimonio subacuático gallego se registró mediante descubrimientos "ocasionales, sin procesos sistemáticos".
El departamento que dirige Fernando Blanco colabora con una ayuda de más de 80.200 euros en un proyecto que permite una búsqueda "masiva, precisa y barata" basada en señales acústicas con técnicas procedentes de la ingeniería civil, la obra militar y la procura de petróleo.
Así, un sonar mide la dureza del suelo del fondo marino y la representa en una escala de blanco a negro y una sonda que mide el volumen y dibuja las alturas obtiene un "mapa" del suelo. El perfilador identifica los materiales de las capas y da pistas de lo que hay debajo del suelo y un magnetómetro detecta los objetos metálicos.
La empresa tiene como objetivo a medio plazo crear un software que integre todos los datos para llevar a bordo en los barcos y que, en pocas horas, ofrezca imágenes de las anomalías y marque los grados de preferencia que pueden resultar de interés, con un alto nivel de automatización, para enfocar hacia el sector turístico.