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SANTIAGO DE COMPOSTELA, 14 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Xunta ha dictado la resolución de denegación definitiva del proyecto de mina de Corcoesto, en la comarca de Bergantiños, presentado por la empresa Mineira de Corcoesto, filial de la canadiense Edgewater. Fuentes del Gobierno gallego han confirmado que la decisión fue trasladada el pasado martes a la compañía, que, no obstante, no tiene constancia de haber recibido la comunicación.
La Plataforma pola Defensa de Corcoesto e Bergantiños ha avanzado la información en un comunicado, en el que indica que, con fecha de 11 de marzo, el director xeral de Enerxía e Minas, Ángel Bernardo Tahoces, "dictó resolución de denegación definitiva del proyecto de mina de oro a cielo abierto", que afectaba a los ayuntamientos de Cabana de Bergantiños, Coristanco y Ponteceso.
En la nota, señala que la resolución llega después de que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, anunciase en el Debate sobre el Estado de la Autonomía el pasado octubre que no se autorizaría el proyecto por no cumplir los requisitos exigidos.
El principal escollo para los planes de Mineira de Corcoesto, que ya había logrado informe ambiental favorable, se refiere a que la Xunta exige una solvencia mínima del 25% de fondos propios sobre la inversión del proyecto, lo que supone que la empresa debe reunir 27 millones en su balance con esta naturaleza, de los 110 que prevé invertir.
Cuando Feijóo avanzó el rechazo de la Xunta, la empresa manifestó que estaba "decidida" a seguir adelante con el proyecto y que negociaba con inversores para reunir la financiación necesaria. Fuentes de la compañía han indicado que continúan trabajando en este sentido y que, por el momento, no les consta que se haya recibido la resolución de denegación del Gobierno gallego.
La Xunta por su lado, ha señalado que se ha trasladado la decisión a la empresa y que los motivos son, como se había avanzado, que no se cumplen los requisitos exigidos para desarrollar el proyecto de explotación.
Por su parte, la Plataforma pola Defensa de Corcoesto ha considerado que los planes no cumplen con los requisitos "técnicos, económicos y ambientales exigidos por la normativa española y europea, a pesar de haber obtenido una declaración de impacto ambiental favorable por parte del Gobierno gallego".
Con esta resolución, ha subrayado, "se cierra la puerta a un proyecto colonial, destructivo y contaminante, incompatible con las actividades económicas que se desarrollan en los ayuntamientos afectados". "Supone una victoria de la ciudadanía que, por medio de numerosas y multitudinarias manifestaciones, mostró un contundente rechazo a este tipo de actividades mineras en Galicia", ha afirmado.
En cualquier caso, avisa de que permanecerá "vigilante" ante "cualquier amenaza de otros proyectos mineros que puedan presentarse en la zona afectada".