VIGO 21 May. (EUROPA PRESS) -
Los conserveros de España y Portugal, incluidas las Islas Azores, han realizado una declaración conjunta con motivo de las negociaciones entre la UE y Tailandia para un tratado de libre comercio en la que piden que las conservas, y especialmente las de atún, sean consideradas "productos sensibles" y queden excluidas del acuerdo.
En un posicionamiento conjunto llevado a cabo en la localidad lusa de Matosinhos, la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescados y Mariscos (Anfaco-Cecopesca), la Associaçao Nacional dos Industriais de Conservas de Peixe (ANICP) y la Associaçao de Conserveiros de Peixe dos Açores (Pao Do Mar) han expresado su "más profunda preocupación" ante este acuerdo, pues auguran que "afectará negativamente al futuro" de esta industria.
Los conserveros recuerdan que Tailandia, el principal productor y exportador de conservas del mundo y el mayor exportador de atún en conserva a Europa, es "altamente competitiva" por tener bajos costes de producción derivados de contar con "mano de obra muy barata", una jornada laboral que "no tiene límites" y un sistema donde no hay "ninguna contribución a la Seguridad Social ni de cualquier otro tipo".
Según apuntan, todo ello "refuerza el efecto negativo" que un tratado de libre comercio tendría para las industrias de conservas portuguesas y españolas, y también para la UE, tanto desde el punto de vista económico, social y del empleo.
El sector conservero cuenta con más de 17.000 trabajadores directos en España y Portugal, y otros tantos indirectos, particularmente en zonas costeras y dependientes de la pesca.
Estos dos países --cuya producción en 2012 ascendió a cerca de 400 toneladas, con un valor de 1.550 millones de euros-- representan cerca del 75 por ciento de la producción comunitaria de conservas de atún, siendo la industria española la que representa la mayor parte. A nivel europeo, el sector conservero cuenta con 120.300 trabajadores y el valor de la producción supera los 3.800 millones de euros.