El 10% de la población sufre algún trastorno de la personalidad y los suicidios se producen con mayor frecuencia en personas mayores
PALMA DE MALLORCA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 4.500 personas se suicidan cada año en España (cerca de un centenar en Baleares), es decir, 10,5 por cada 100.000 habitantes, según ha informado el vicepresidente de la Sociedad Española de Psiquiatría Legal, Alfredo Calcedo, quien ha advertido de que en los últimos años se ha producido un aumento de la "sucidialidad crónica" (riesgo de suicidio mantenido en el tiempo), sobre todo, en personas que sufren un Trastorno Límite de la Personalidad (TLP), que llegan a realizar varios intentos de quitarse la vida.
Con motivo de la celebración en Palma del XX Congreso Nacional de Psiquiatría Legal en la que participan cerca de 300 profesionales de todo el Estado, Calcedo ha apuntado que el 10 por ciento de la población sufre algún tipo de trastorno de la personalidad, al tiempo que ha detallado que los suicidios se producen con mayor frecuencia entre las personas mayores, si bien ha indicado que el suicidio "anda cerca de ser la primera causa de muerte entre los adolescentes".
Por otro lado, ha señalado que el TLP se ha ido incrementando entre la población, debido a los cambios sociales, que están provocando que haya gente con una "gran inestabilidad emocional, lo que les hace ser especialmente sensibles a las rupturas de pareja o a problemas con sus familias de origen".
De este modo, ha recordado que "hace 30 años no era un problema" esta enfermedad, si bien actualmente, la sociedad es cada "más individualizada", al tiempo que "el rol de la familia se va reduciendo y las familias monoparentales son cada vez más frecuentes", lo que provoca este tipo de trastornos, ya que "se da la paradoja de que hay mucha más libertad, pero, sobre todo, mucha más soledad".
En esta línea, el vicepresidente de la SEPL ha aseverado que el ser humano sigue necesitando "relaciones de apego con alguien y mientras antes había un entorno familiar mucho más protector, ahora como estamos en una sociedad mucho más individualista, la gente manifiesta esas necesidades no cubiertas con gestos suicidas que mucha veces son una apuesta que hace el paciente para cambiar algo de su entorno que no le gusta".
Así, ha apuntado que las personas que sufren TLP "suelen reaccionar con conductas auto agresivas", si bien ha recordado que el sistema sanitario público es limitado, por lo que no se pueden ingresar en centros especializados a todas los ciudadanos que han intentando suicidarse, sino que a la mayoría se las trata con fármacos y atención psiquiátrica.
"EVALUAR EL NIVEL DE RIESGO"
"En las urgencias de los hospitales de Madrid llegan cada día entre cinco y ocho personas que han intentado suicidarse, aunque hay que tener en cuenta que no todas tenían el deseo real de quitarse la vida", ha aseverado, al tiempo que ha explicado que cuando se producen estas situaciones, los profesionales evalúan el nivel de riesgo para determinar si se debe proceder al ingreso del enfermo.
En esta línea, ha admitido que el tratamiento de este tipo de pacientes que sufren un TLP es "complicado", por lo que requieren un seguimiento "intensivo", si bien ha insistido en que "no se puede ingresar a la gente cada vez que comete un intento de suicidio", sino que, a veces, es suficiente con un programa intensivo de seguimiento del paciente para que aprenda a llevar un "estilo de vida sin dar tantos bandazos" en el plano emocional.
Concretamente, Calcedo ha desvelado que las estadísticas reflejan que el 10 por ciento de la población que sufre TLP se va a suicidar, a pesar de lo cual ha reiterado que no se puede mantener ingresada a toda aquella persona que sufra este trastorno, sino que se le debe enseñar a "afrontar las pérdidas afectivas y a controlar su impulsividad".
Por otro lado, ha destacado que en algunas Comunidades Autónomas se han creado unidades específicas de atención a pacientes con TLP y, en este sentido, ha revelado que hay unos programas de tratamiento intensivo en régimen de hospitalización, mediante los cuales se busca que los pacientes que tienen una personalidad "muy desestructurada por su irritabilidad e impulsividad aprendan a llevar un estilo de vida con una conducta no tan desestabilizada".
Calcedo ha resaltado que en Madrid ya hay dos centros especializados en unidades de hospitalización de agudos, uno público y otro concertado, que, según ha señalado, son rentables, teniendo en cuenta que los enfermos de TLP "encadenan ingresos en las unidades genéricas de psiquiatría acudiendo previamente a urgencias con bastante frecuencia". Por ello, ha dicho que "concentrar a los pacientes" en un mismo centro y aplicarles un "tratamiento intensivo", supone un "ahorro" para el gasto sanitario.