Manexmar 88 también desarrolla un barco pionero para luchar contra la contaminación marina que será el primero con casco de metal que se construye en Baleares
PALMA DE MALLORCA, 22 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una nueva empresa mallorquina está desarrollando actualmente un sistema pionero en todo el mundo de piloto automático, con capacidad para realizar maniobras evasivas, que, una vez esté instalado a bordo de cualquier barco, evitará que se vuelvan a producir accidentes de navegación como el que sufrió el 11 de agosto de 2007 el buque 'Don Pedro', de la naviera Iscomar, cuando colisionó contra un islote en el que había un faro, y que estaba situado a poco más de una milla del Puerto de Ibiza.
Casi un siglo después del hundimiento del 'Titanic' --que se produjo en 1912 en aguas del Atlántico tras chocar contra un iceberg--, aún no había inventado nadie un sistema de navegación que, más allá de avisar con una alarma de la posibilidad de que se produzca una colisión inminente entre barcos o con escollos, además, maniobre la nave hasta sacarla fuera de peligro y, a continuación, entregue de nuevo el gobierno de la misma a su tripulación. Ahora, el piloto automático inteligente es casi una realidad que se encuentra pendiente de patente internacional.
La idea surgió cuando Juan Mariano Bendito Vallori, maquinista naval y patrón de cabotaje de la marina mercante con más de 20 años de experiencia, fue enviado en agosto de 2007 por la Dirección General de Emergencias del Govern balear a Ibiza para participar directamente en la retirada del fuel que vertió el carguero 'Don Pedro' tras el accidente que sufrió. Allí tendió barreras absorbentes de hidrocarburos y coordinó a administraciones y voluntarios. Además, pudo observar las carencias y defectos que tenía el sistema, y que se decidió a solucionar.
Según expuso en declaraciones a Europa Press, por un lado, quería encontrar la manera de que un buque de grandes dimensiones pudiese maniobrar automáticamente ante la aparición de un escollo o tráfico por su proa. Por otro, se asombró al descubrir que no existían barcos con capacidad para luchar contra la contaminación en aguas muy próximas a la costa y, de hecho, el remolcador de altura 'Clara Campoamor', desplazado a la zona por Salvamento Marítimo, tenía un calado de 12 metros, con lo cual, apenas pudo contribuir a las tareas de limpieza.
Algunos meses después, Bendito creó la empresa Manexmar 88, dedicada a la investigación e innovación en tecnología naval, cuyos dos primeros productos son, precisamente, el Piloto Automático Evasivo (PAE) y el buque 'Eyco 23', de 23 metros de eslora, ligero, con gran potencia y las mejores condiciones para intervenir de manera resolutiva en las emergencias marinas, como contaminación de las aguas, pero también en investigación oceanográfica y apoyo logístico a trabajos submarinos.
El barco --que también tiene una versión tipo lancha, de 10 metros de eslora-- "no es un remolcador", aunque, con unos motores de 2.200 CV, tiene más potencia que algunos de los que prestan servicio en el Puerto de Palma. Y, entre sus peculiaridades, destacan que ha sido dotado de gancho y carretel de arrastre, grúa, cañón contra incendios, skimmer, tanques para almacenar el combustible que se retira del mar --con capacidad para 10 toneladas--, así como tangones laterales para enganchar las barreras absorbentes. Y, lo más importante, un calado de sólo 1,35 metros, que le permiten actuar casi en la orilla.
CONSTRUIDO ÍNTEGRAMENTE EN MALLORCA
Manexmar 88, que tiene su sede en Alcúdia (Norte de Mallorca), estima en alrededor de un millón de euros el coste del 'Eyco 23', que ha ofertado al Govern Balear, al Instituto Oceanográfico, a la Sociedad de Salvamento y Seguridad Marítima (Sasemar) e, incluso, a la Unidad Militar de Emergencias, causando muy buena impresión, al parecer, en todos los casos, aunque su venta resulta compleja en tiempos de crisis, admitió Bendito, quien, sin embargo, lo consideró una buena alternativa para salir de la actual situación económica, ya que su construcción --modular-- se realizará íntegramente en Mallorca y supondrá la contratación de hasta 30 empleado.
Esa cantidad podrá verse incrementada hasta los 50 trabajadores, si se contabilizan los puestos indirectos que podría generar la iniciativa. Y, por otra parte, el PAE situaría su base de operaciones en el Parc Bit, donde será desarrollado en colaboración con expertos del Departamento de Electrónica de la Universidad de las Illes Balears, al basarse en un computador estocástico (NEST) que tiene capacidad para "aprender" con cada maniobra. Por el momento, el proyecto ha merecido el interés de la compañía líder tecnológica Indra. De llevarse adelante este proyecto, supondrá "un avance en términos de innovación para Baleares", señaló su impulsor.
Bendito se preguntó un día "¿cómo es posible que en el siglo XXI un barco salga del Puerto de Ibiza y choque con un faro?". Tras investigar sobre ello, llegó a la conclusión de que, a pesar de la existencia de diversos sensores, desde radar a sondas y GPS, "si el timonel falla o no está en el puente, se produce el choque", puntualizó. Por eso, considera que "será rentable para cualquier naviera o compañía de seguros" y, de hecho, cree que en el futuro será obligatorio dotar con él a todas las naves, como ya pasa con el radar, del que el PAE toma datos.