Unos 5.000 "terroristas" islamistas de origen chino están combatiendo en Siria, según el embajador

MADRID 14 Feb. (EUROPA PRESS) -

El embajador sirio en China, Imad Mustafá, ha asegurado que unos 5.000 "terroristas" islamistas de origen chino están combatiendo en la actualidad en la guerra en Siria y en su mayoría proceden de la región de Xinjiang.

"El número de los terroristas procedentes de China ha aumentado en grado considerable en este conflicto. Actualmente podemos hablar de unos 5.000", ha afirmado el representante diplomático sirio en Pekín.

Mustafá ha contado que la mayoría de los milicianos son oriundos de la región autónoma uigur de Xinjiang y que llegaron a Siria a través de Turquía, muchos de ellos con sus familias.

"Como resultado tenemos niños chinos en Siria que publican en YouTube sus vídeos portando machetes y fusiles Kalashnikov y hablando de la yihad en Siria", ha asegurado el embajador sirio, en una entrevista concedida a la agencia de noticias rusa Sputnik.

Una parte de los yihadistas chinos en Siria, según Mustafá, militan en el autoproclamado Estado Islámico y otros se identifican con el Frente Fatá al Sham, el antiguo Frente al Nusra.

El embajador sirio ha dicho que el cien por cien de los yihadistas llegados de China se filtraron desde el territorio de Turquía, un país del que ha dicho que "creó las condiciones para su traslado" aunque en la actualidad está combatiendo a Estado Islámico.

"No existirían si no fueran apoyados, alentados y manipulados ideológicamente desde Turquía, incluso se hacen llamar Turquestán Este", ha asegurado el responsable diplomático sirio. China sufre el problema creciente del terrorismo islamista uigur, la etnia minoritaria musulmana de Xinjiang que denuncia la represión de las autoridades de Pekín.

El Gobierno chino, a su vez, defiende el desarrollo económico de la provincia y las enormes inversiones destinadas a la mejora de sus condiciones de vida y acusa al grupo uigur Movimiento Islámico del Turkestán Este de estar desarrollando actividades terroristas en Xinjiang y de reclutar combatientes para la causa yihadista en Oriente Próximo.