ESTAMBUL, 16 Jun. (especial para EUROPA PRESS, Asier Vera) -
Los activistas del Parque Gezi de Estambul que este sábado han sido desalojados por la Policía con el uso de gases lacrimógenos y cañones de agua han advertido al primer ministro de Turquía, Recep Tayip Erdogan, de que no van a "dejar de resistir", si bien algunos de ellos temen una guerra civil en caso de que el 50 por ciento de la población que apoya al partido del Gobierno, Justicia y Desarrollo, decidan enfrentarse a los ciudadanos que protestan.
Así lo han señalado a Europa Press varios activistas que han participado estos días en el Parque Gezi y en la Plaza Taksim, algunos de los cuales han sufrido la intervención policial iniciada a las 20.55 horas y que, según el gobernador de Estambul, Huseín Avni Mutlu, ha causado, al menos, 46 heridos.
Concretamente, una de las jóvenes que ha sido desalojada del Parque Gezi ha señalado que tras avisar la Policía de que la acampada era ilegal y que iba a proceder a desalojarla, solo ha dado 15 minutos a las miles de personas que se encontraban en esta zona verde del centro de la ciudad, por lo que muchas de ellas no han tenido tiempo de abandonar el parque y han resultado heridas por inhalar los gases lacrimógenos que han lanzado los agentes.
"Había caminos para escapar del parque y la Policía los ha cerrado y por ello ha habido muchos heridos", ha censurado, al tiempo que ha calificado de "brutal" la actuación policial, dado que, a su juicio, ha utilizado una "violencia" que nunca antes la había visto igual.
Esta activista ha manifestado que nadie había provocado previamente a los agentes, por lo que la situación en el Parque Gezi era "muy tranquila", hasta el punto de que había varios niños con sus familias, algunos de los cuales se perdieron tras la intervención policial y fueron llevados al hotel Divan para intentar encontrar a sus padres.
Finalmente, ha advertido de que los activistas no solo no van a dejar de protestar contra las políticas del Gobierno de Erdogan, sino que "cada vez va a haber mas gente" manifestándose, de forma que ha recordado que ya se ha convocado una huelga general para el próximo lunes por parte del sindicato de funcionarios.
En similares términos se ha expresado otra joven, llamada Burcu, quien ha augurado que tras el desalojo del Parque Gezi, donde la Policía ha "atacado con mucha fuerza", la gente esta más "enfadada" y, en su opinión, "cada vez se va a manifestar más gente".
ERDOGAN TIENE 'MIEDO A UNA REVOLUCION'
Para Burcu, Erdogan ha decidido desalojar el Parque Gezi porque tiene "miedo de que haya una revolución" teniendo en cuenta que las protestas se iniciaron hace poco más de 15 días en contra de la construcción de un centro comercial en esta zona verde, si bien ahora los ciudadanos se manifiestan por más cosas en contra de las políticas del Gobierno.
"Erdogan no sabe que hacer y está sorprendido con las protestas, ya que, hasta ahora, ha decidido muchas cosas y nadie había protestado", ha manifestado. Por otro lado, esta joven ha recalcado que para que las protestas tengan buenos resultados, "tenemos que aguantar" y seguir con ellas aun sabiendo que "van a pasar cosas malas".
Mientras, otro joven, llamado Burcu, ha vaticinado, en declaraciones a Europa Press, que "puede que haya una guerra civil" en Turquía, dada la "polarización" existente entre los que apoyan a Erdogan y los que se posicionan en contra de sus políticas.
Burcu, quien se encontraba en el Parque Gezi en el momento en el que se han producido las cargas policiales, ha reprobado que los agentes han impedido que muchos activistas pudieran entrar en uno de los hoteles ubicados en la parte trasera de esta zona lanzándoles botes de gas, de forma que, ha dicho, ha visto a mucha gente herida que no podía respirar.
Otra joven que permanecía dentro del parque, llamada Emel, ha aseverado que antes del desalojo no tenia miedo y sigue sin tenerlo, dado que, a su juicio, existe una "unidad" por parte de los activistas y un "único líder", refiriéndose al fundador de la República de Turquía, Mustafá Kemal Atatürk, de quien, ha dicho, "nos enseñó todo y solo tenemos que seguirlo".
"Estamos luchando y solo defendemos nuestros derechos", ha aseverado, al tiempo que ha reconocido que tiene miedo de que haya una guerra civil, ya que, en tal caso, ha recalcado que Turquia dejaría de ser un país.
"DESESPERANZADA" CON EL FUTURO
Por su parte, Gul, una joven que ha asistido diariamente al Parque Gezi a pesar de no haber dormido en él, se ha mostrado "desesperanzada" con el futuro de Turquía, porque, en su opinión, el desalojo del parque "no es el final", sino que habrá "mas ataques cada día", dado que "la libertad está muerta y completamente perdida".
Para esta diseñadora gráfica, Turquía se va a un tiempo "muy oscuro", dado que, a su entender, es "posible" que haya una guerra civil, si bien ha recalcado que no será por los activistas que son personas "inteligentes que no saben usar las armas", aunque el otro 50 por ciento de la población "sí que puede cogerlas" para defender al Gobierno.
Así, ha criticado que los ciudadanos que apoyan a Erdogan "solo escuchan al Gobierno" y harán "lo que le pida que haga", dado que "muchos de ellos reciben dinero, comida y viviendas del Ejecutivo para que lo sigan respaldando con sus votos".
Por ello, ha anunciado que si en las próximas elecciones que se celebraran en 2015 vuelve a ganar Erdogan, ella no quiere vivir en Turquía, dado que, según ha subrayado, solo desea vivir en una sociedad que sea "más respetuosa con mi vida y con la gente".
Finalmente, ha estimado que Turquía esta "más cerca de una revolución" que hace una semana, de forma que ha afirmado que no tiene miedo a esto, sino a las consecuencias que provocaría en el conjunto de la población respecto a la posible pérdida de vidas humanas, tal como ha sucedido en las ultimas semanas cuando han muerto cuatro jóvenes y un agente policial.