MAGDEBURGO (ALEMANIA), 13 (Reuters/EP)
Los seguidores del partido xenófobo Alternativa para Alemania (AfD) han celebrado efusivamente los resultados de las elecciones regionales que han permitido a la formación obtener representación en los estados de Baden-Wurtemberg, Renania-Palatinado y convertirse en la segunda fuerza política en Sajonia-Anhalt.
"¡Qué tarde tan maravillosa!", ha afirmado el líder de AfD en Sajonia-Anhalt, Andre Poggenburg, en un encendido discurso desde Magdeburgo, la capital estatal, en el que ha destacado que el resultado obtenido es "brillante".
"Hemos luchado como leones por vuestra tierra", ha reivindicado Poggenburg, que ha criticado a la canciller, Angela Merkel, a la que considera "la peor canciller de la historia de Alemani".
En Sajonia-Anhalt AfD ha logrado un destacado 24 por ciento de los votos, mientras que ha conseguido casi un 15 por ciento de voto en Baden-Wurtemberg y más del 12 por ciento en Renania-Palatinado.
AfD se fundo hace apenas tres años para protestar contra el rescate en la eurozona, pero se ha transformado en un partido centrado en la problemática de la inmigración y los refugiados aprovechando el flujo procedente de Turquía con rumbo al centro de Europa y apropiándose de parte del electorado conservador de la Unión Demócrata Cristiana (CDU) de Merkel.
Las encuestas a pie de urna sin embargo revelan que la mayoría de los votantes de AfD eran personas que nunca habían votado a ningún partido, aunque también hay miles de votantes procedentes de la CDU, en particular en Baden-Wurtemberg.
"¡MERKEL TIENE QUE IRSE!"
Unos 250 simpatizantes de AfD, la mayoría de mediana edad, han celebrado ruidosamente los resultados en Magdeburgo a medida que aparecían en la pantalla de un proyector. En Berlín, otros seguidores de AfD corearon la frase "¡Merkel tiene que irse!".
"Esto es una democracia. Estoy muy, muy contento", ha declarado Gerlach Holm, de 67 años, que ha viajado desde Hamburgo a Magdeburgo para festejar el resultado de estas elecciones. Lleva una camiseta con el lema "Mi corazón late por Alemania".
Por el momento todos los demás partidos alemanes rechazan formar coaliciones con AfD, pero eso no parece desanimar a sus votantes. "No he votado a AfD porque esperase que fueran a gobernar, lo hice para protestar contra las políticas del gobierno federal", ha argumentado Thorsten, de 48 años.
En 2013 AfD no logró llegar al 5 por ciento mínimo para entrar en el Parlamento federal, pero ahora cuenta ya con representación en la mitad de los 16 parlamentos regionales alemanes.