La ONG recuerda a Ankara que también es responsable de lo que puedan hacer los rebeldes aliados
MADRID, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas Armadas de Turquía y los rebeldes sirios que las apoyan en su ofensiva en el noreste de Siria "han actuado con una absoluta falta de respeto por la vida humana, perpetrando graves abusos y crímenes de guerra", entre ellos ejecuciones extrajudiciales, ha denunciado la ONG Amnistía Internacional.
La organización, que ha entrevistado a testigos de la ofensiva entre el 12 y el 16 de octubre y ha analizado diversos documentos como grabaciones de vídeo o informes médicos, ha afirmado que hay "pruebas concluyentes" de las violaciones de Derechos Humanos. Estas evidencias señalan a Turquía y también a los rebeldes de Ahrar al Sharqiya, uno de los grupos que forman parte del Ejército Nacional Sirio.
El secretario general de Amnistía, Kumi Naidoo, ha asegurado que la ofensiva "ha sembrado el caos en las vidas de los civiles sirios que, una vez más, se han visto obligados a huir de sus casas y viven con un miedo constante a bombardeos indiscriminados, secuestros y ejecuciones sumarias". Turquía, ha añadido, "es responsable de las acciones de los grupos armados a los que apoya, arma y dirige".
Amnistía cita entre los ataques "ilegales" un ataque aéreo perpetrado el 12 de octubre en Salhiye. "Todo ocurrió muy rápido. En total, hubo seis heridos y cuatro muertos, entre ellos dos niños. No podría decir si eran niños o niñas porque sus cuerpos estaban negros", ha afirmado un testigo de la Media Luna Roja Árabe Siria al recordar el rescate de víctimas de entre los escombros.
Dos de los proyectiles impactaron cerca de una escuela a la que habían acudido desplazados por el conflicto y, según la fuente, la línea de combate más cercana estaba a un kilómetro de distancia y no había objetivos militares en la zona atacada en Salhiye.
ATAQUES INDISCRIMINADOS
Los ataques "indiscriminados" también han afectado a Qamishli, donde se han perpetrado bombardeos contra zonas residenciales, una panadería y un restaurante desde el 10 de octubre, según Amnistía. El 13 de octubre, un ataque de la aviación turca alcanzó un convoy de unos 400 vehículos civiles que circulaba entre Qamishli y Ras al Ain, lo que provocó seis muertes, entre ellas la un periodista.
"Atacar un convoy civil es imperdonable", ha subrayado Naidoo, que ha instado a "todas las partes" a respetar el Derecho Internacional Humanitario para "evitar, o al menos minimizar, el daño sobre la población". "Tampoco hay justificación para los bombardeos indiscriminados de zonas civiles con armas imprecisas como morteros", ha añadido.
El secretario general de Amnistía Internacional también ha subrayado que "matar a personas indefensas a sangre fría es completamente condenable y un crimen de guerra flagrante", después de que hayan salido a la luz grabaciones de supuestas ejecuciones efectuadas por Ahrar al Sharqiya, incluida la de la política kurda Hevrin Khalaf y su guardaespaldas.
Segun la ONG, Khalaf fue atacada cuando viajaba en coche. Un amigo ha contado a Amnistía que cuando intentaron llamar a su teléfono alguien contestó en árabe para confirmarles el asesinato y lanzarles una amenaza: "Los kurdos sois traidores. Todos los del partido (PKK) son agentes".
PIDE UNA AYUDA SIN RESTRICCIONES
La organización ha expresado su preocupación por la situación de los desplazados, en la medida en que pueden quedarse sin suministros básicos y sin ayuda. En la localidad de Derbassiya, alrededor del 90 por ciento de la población corresponde a personas que han huido de sus hogares y uno de estos desplazados ha advertido de que "no hay organizaciones humanitarias al sur".
"Necesitamos suministros básicos como agua, comida, ropa, mantas y colchones. Necesitamos una clínica. El invierno se acerca. Necesitamos una solución, especialmente para las familias que viven a la intemperie", ha avisado este desplazado. Un cooperante ha trasladado a Amnistía su preocupación por quienes sufren enfermedades crónicas, cuya vida corre "un gran peligro".
Kumi Naidoo ha subrayado que "todas las partes" deben facilitar un acceso "sin restricciones" a las organizaciones humanitarias, tanto locales como internacionales. "Las acciones de Turquía amenazan con limitar la entrega de asistencia vital y ayuda médica a quienes la necesitan, provocando una catástrofe humanitaria en un país que ya está devastado por la guerra", ha señalado.-