Policía alemana
VINCENT KESSLER / REUTERS
Actualizado: lunes, 18 diciembre 2017 20:01


BERLÍN, 18 Dic. (Reuters/EP) -

Un tribunal alemán ha condenado a tres años y tres meses de prisión a un alemán simpatizante del Estado Islámico que había preparado una bomba trampa para atraer a policías y después matarles con una bomba casera. La nota más llamativa de este caso es que el procesado, de 27 años, se movía previamente en los círiculos de la ultraderecha

El hombre, identificado como Sascha L., había realizado dos pruebas exitosas con un explosivo casero en enero en su localidad natal, Northeim, en el centro de Alemania, según la Fiscalía, pero finalmente fue detenido en febrero. En el registro se hallaron productos químicos que podrían usarse para fabricar bombas.

Dos vídeos hallados durante la investigación muestran al hombre prestando juramento de lealtad al Estado Islámico y su líder, aunque la sentencia sostiene que no había vínculo personal alguno entre el encausado y el grupo yihadista ni ha recibido financiación alguna, informa la televisión alemana NDR. La sentencia acepta como atenuante la colaboración del imputado con las autoridades tras su detención y que confesó sus planes.

El semanario alemán 'Der Spiegel' había informado de que el ahora convicto se movió en el entorno de la ultraderecha, pero más tarde abrazó el credo musulmán y más concretamente la corriente salafista.

En el proceso hay otros tres individuos acusados de colaboración con el reo. Dos de ellos han sido declarados culpables y condenados a un año de prisión y a 100 horas de servicio comunitario respectivamente. El tercero ha sido absuelto.

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