NUEVA YORK/SAN FRANCISCO, 26 Jun. (Reuters/EP) -
Cientos de personas han participado este domingo en el desfile del Orgullo Gay en las ciudades estadounidenses Nueva York y San Francisco, teniendo los actos en la primera más tintes políticos, con numerosas críticas al presidente, Donald Trump.
Un grupo de asistentes ha marchado por la Quinta Avenida con fotos del mandatario y el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, mientras que otros han ondeado carteles con la palabra 'Resistir' y la bandera arcoiris.
Asimismo, el senador demócrata Brad Hoylman, ha afirmado que la comunidad LGTB está "bajo asedio" por parte del Gobierno, según ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.
"(Trump) Ya ha anulado los derechos para los estudiantes transgénero, por ejemplo, y la lista sigue. Por eso tenemos mucho más trabajo por hacer. Por eso estamos hoy aquí", ha agregado.
La marcha ha terminado en Christopher Street en el West Village de Manhattan, para conmemorar los disturbios que se desataron allí en 1969 cuando la Policía irrumpió en Stonewall Inn, un bar gay, en un evento considerado como un punto de inflexión en el movimiento por los derechos de los homosexuales.
Los maestros de ceremonias de la marcha de Nueva York han sido la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), elegida por su historial de litigar para defender los derechos de los homosexuales; Brooke Guinan, una mujer transgénero que trabaja como bombera en la ciudad; y Geng Le, activista de derechos de los homosexuales en China.
Por contra, una pequeña cantidad de carteles contra Trump en San Francisco quedó opacada por el deseo de celebrar. "Es un día demasiado bueno como para estar enfadados por Trump", ha dicho Richard Babb, un residente de la ciudad, de 66 años.
Durante su campaña, Trump prometió proteger los derechos de la comunidad LGTB, si bien su decisión en febrero de revocar una medida del Gobierno del expresidente Barack Obama que permitía a estudiantes transgénero elegir qué baño usar, y su orden ejecutiva del mes pasado para promover la "libertad religiosa" fueron consideradas por algunos como medidas discriminatorias.