MADRID, 17 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Senado de Australia ha votado este jueves a favor de rechazar el impuesto especial a las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, aprobado en 2011 y promulgado en 2012 durante el Gobierno de la laborista Julia Gillard.
El Senado ha rechazado este impuesto por 39 votos a favor y 32 en contra, según ha informado la cadena de televisión australiana ABC. Australia se encuentra entre los países más contaminantes per cápita debido a su alta dependencia de las centrales térmicas, que generan la corriente eléctrica mediante la combustión de carbón.
El primer ministro, Tony Abbot, cuya coalición se impuso a los laboristas en las elecciones celebradas el año pasado en el país, había convertido la derogación de este impuesto en uno de los principales objetivos de su Gobierno.
En base a la legislación aprobada por el Gobierno de Gillard, los principales agentes contaminantes del país, las centrales térmicas que se alimentan del carbón, pagaban 23 dólares (18,16 euros) por tonelada de dióxido de carbono, una cifra que duplica a la impuesta por la Unión Europea (UE), de 8,15 euros por tonelada.
Asimismo, la reforma permitía la compraventa de derechos de emisión en el extranjero a partir del año 2015, una de las concesiones realizadas por Gillard, tras varios años de negociaciones entre empresas, sindicatos y partidos políticos.