MOSCÚ, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -
Los nuevos balances oficiales estiman que al menos 13 personas han fallecido y al menos 27 han resultado heridas en el atentado terrorista cometido este domingo en la estación de la ciudad rusa de Volgogrado, frente a las cifras proporcionadas inicialmente por el Gobierno local, que informaban de 18 fallecidos y más de 40 afectados, según informa la agencia oficial de noticias rusa RIA Novosti.
Mientras tanto, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha instado a las fuerza de seguridad rusas a que tomen todas las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los ciudadanos en lo que se trata del segundo atentado suicida cometido en la ciudad en menos de tres meses.
El Gobierno local ha anunciado tres días de luto, desde el 1 al 3 de enero, en memoria de las víctimas del atentado y que compensará con un millón de rublos (unos 22.300 euros) a los afectados, según informaron fuentes oficiales locales a RIA Novosti
La explosión tuvo lugar alrededor de las 9.34 de la mañana --hora peninsular española-- en el edificio central de la estación Volgograd-1, cerca de los detectores de metal situados en el vestíbulo, según la Policía rusa, que ha incrementado los controles en las localidades más próximas a Volgogrado, mientras los servicios de Emergencia han comenzado el traslado de las víctimas a Moscú.
"La gente estaba tirada en las escaleras", indicó Valentina Petrichenko, testigo de la explosión. "La explosión fue tremenda. La gente comenzó a correr aterrorizada. De repente aparecieron ambulancias y policías por todas partes", declaró al canal Russia 24.
Volgogrado es una ciudad en la que viven alrededor de un millón de personas y que está situada 690 kilómetros al noroeste de Sochi, sede de los próximos Juegos Olímpicos de Invierno. Está cerca del Cáucaso Norte ruso, habitado por una mayoría de musulmanes, en el que impera la violencia diaria.
El pasado mes de octubre, en esa misma ciudad, una terrorista suicida causó la muerte a seis personas y dejó heridas a otras treinta al detonar su carga explosiva en un autobús. El líder insurgente Doku Umarov, un señor de la guerra de Chechenia, el pasado mes de julio exhortó a sus seguidores a usar "la máxima fuerza" para evitar que el presidente ruso, Vladimir Putin, ponga en marcha los Juegos de 2014.